192. Alimentos roba energía | Álvaro Vargas 4i332m

A comer se aprende con Álvaro Vargas.

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Bienvenidos y bienvenidas y muchísimas, muchísimas gracias por estar ahí, por estar acompañándome. Permíteme un poquito de publi que uno no vive del aire con estos cambios de tiempo. Unos días hace sol, vienen las lluvias, suben, bajan las temperaturas, vamos, lo que viene siendo la primavera, pero cada vez más acentuada, pues nuestra microbiota se resiente.

¿Y qué ayudita tenéis para eso? Pues mis probióticos.

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Veréis que el complemento se llama BecVital Defensas.

De todas formas, os pongo el enlace en labio.

Pero un chutillo de probióticos para nuestra microbiota.

Ahora, con estos cambios de tiempo, viene fenomenal.

Y venga, vamos ya con el tema de hoy.

Seguro que alguna vez has comido o bebido algo que te deja medio zombi, como que te falta energía. Y hoy os voy a hablar de algunos alimentos que incluso pueden parecer energéticos, pero es que nos dejan aplatanados, fuera de combate. Lo primero que hay que aclarar, cuando digo alimentos roba energía, no me refiero a algo mágico ni a algo exagerado. Ya sabéis que yo huyo de todo eso.

Me refiero a que hay alimentos que bien ralentizan la digestión, que afectan a nuestro sistema nervioso o que desequilibran los niveles de azúcar y que acaban haciendo trabajar muchísimo más a nuestro organismo.

Si la sangre, los nutrientes, el oxígeno están muy volcados con una tarea, como puede ser esto que os acabo de decir, controlar los niveles de azúcar, controlar, equilibrar el sistema nervioso, hacer la digestión, digestiones pesadas, pues si sangre, nutrientes y oxígeno, entre otros, están muy volcados con esa tarea, nos quedará menos nutrientes, menos sangre, menos oxígeno para otras tareas.

Es decir, que nos sentiremos bastante más cansados.

Por eso hablo de alimentos roba energía.

No pienses en nada mágico, esotérico o muy extraño.

Os voy a dar un listado de esos alimentos roba energía.

Vamos a ir comentando uno a uno.

El primero no os va a pillar de sorpresa.

Los azúcares simples, especialmente los contenidos en refrescos y bollería industrial.

Bueno, o también la bollería casera, si le ponemos mucho azúcar.

Esto de que parece que si hago un bizcocho en casa va a ser más saludable que el bizcocho del supermercado, de la pastelería.

Oye, pues depende de los ingredientes que uses.

Si en tu pastel, en tu bizcocho utilizas harina blanca y mucho azúcar y aceite de baja calidad, como puede ser un girasol, pues no será mejor que el que vendan en el supermercado.

Siempre hablo a nivel nutricional.

Luego a nivel de sabor seguro que tú le das un mejor toque.

¿Por qué los azúcares simples? Pues porque, ya lo he dicho muchas veces, sube muy rápido la glucosa, ya que estos azúcares se absorben de manera muy rápida e inmediata.

Y después de esa subida enorme de glucosa, pues llega un bajón como para compensar.

Es una montaña rusa de subidas y bajadas de glucosa de la que os he hablado en bastantes ocasiones.

Esto no afecta solamente al sistema digestivo, sino que principalmente afecta al sistema nervioso.

Y se ha relacionado estos ciclos de subidas y bajadas con una mayor fatiga.

Deberíamos reducir los azúcares simples en la medida de lo posible.

Si un domingo por la tarde te apetece merendarte algo dulce, pues tampoco pasará nada.

Pero no, por ejemplo, todos los días en el desayuno tomaría esa bollería, porque, claro, a la larga va a afectar y de forma muy decisiva.

Y si encima, al principio de la mañana, nos estamos metiendo, como la bollería industrial, una masa de azúcares, aceites de baja calidad, harinas refinadas, y nos metemos eso ya de primera mañana, que le costará bastante a nuestro organismo digerir o subir y bajar esta montaña rusa de glucosa, pues ya empezamos mal el día.

Si es de forma puntual, oye, que no pasa nada.

Lo mismo pasa, y no me voy a entretener, porque de esto os he hablado muchísimas veces, con el pan blanco y la pasta blanca, que están hechos a partir de harinas refinadas, de harinas blancas, pues es exactamente lo mismo.

Son azúcares libres, subidas y bajadas de glucosa.

Lo importante es coger siempre pan y pasta integrales.

Y, además, con los integrales, ¿qué hacemos? Que la energía dura más, porque no se absorbe de forma rápida y se consume de forma rápida, sino de una forma más lenta, más lenta, más lenta.

Entonces nos proporcionan energía durante muchísimo más tiempo.

Pan y pasta siempre integrales.

Otro grupo de alimentos, en este caso una forma de cocinado que afecta esto de la energía, pues los fritos.

Los aceites sometidos a altas temperaturas son difíciles de digerir, sobre todo aceites que son más inestables al calor, como puede ser el de girasol.