Capítulo 10. Leyes Penales 242e4p

Leyes penales la prueba de fuego a la que fuimos sometidos el día anterior nos hizo comprender de lo que éramos capaces de hacer y hasta donde nuestra tenaz inquieta forma de tomar decisiones nos podría guiar en los proyectos que cada uno tenía en su cabeza al en la armada y pretender una especialidad que se desarrollaba indudablemente en la mar y en los trabajos dirigidos a conseguir que los buques navegas en había dos interrogantes de vital importancia para nosotros y que siempre rondaban nuestros pensamientos una de ellas ya despejada era aprobar no se a nosotros mismos y éramos capaces de su vida los palos sin padecer vértigo y poder trabajar a una altura de casi cincuenta metros sin acusar esa sensación que te deja maniatado y sin capacidad de movimiento como ya le había ocurrido algún compañero el día anterior la otra era saber si cuando navegas hemos podríamos soportar el movimiento constante bajo nuestros pies del suelo que usábamos que ya en adelante llamaríamos cubierta en estas vacaciones andábamos valladolid y yo mientras hacíamos tiempo en el castillo del velero aguardando el toque para reunirnos información a fin de asistir a la lectura de las leyes penales a pesar de estar comenzando la mañana el sol se abría paso entre una leve neblina que envolvía las ria ferrol ana sus primeros rayos al incidir sobre nuestros uniformes de paseo de color azul no se advertían que el día iba a ser caluroso al moverse ni una brigada de viento valladolid limpiando los ojos para protegerse del sol y mirando hacia la voladura del galatea después de un largo bostezo me miró con cara somnolienta y dijo bueno parece que ya está superado lo de ayer ahora queda saber si nos maría haremos o no cuando navegamos aunque eso hasta dentro de un año no lo sabremos que va me han dicho que durante el curso saldremos a navegar en diferentes tipos de buques eso forma parte de la maniobra práctica quien te lo ha dicho pues quien va a ser un cabo primero eventual el que está en el rancho con nosotros el chavo largo pues a mi no se me habría ocurrido preguntarle eso pues pensaría que a que he venido a la marina si los barcos se mueven pues me ha dicho que al menos una vez al mes embarque haremos en patrulleras destructores de las láminas e incluso en submarinos donde navegar hemos en superficie y en profundidad vaya seguro que los draga minas notaremos lo que es moverse de verdad cuanto más pequeño sea el buque más se moverá no he oído que estos barcos son de madera y tienen poco calado para evitar las minas de esa manera pasan por encima pues claro que sí o al menos eso me han dicho dicen que estar en un draga minas es muy duro al hablar de traca minas dominadores comentan de sus tripulantes que son hombres de hierro para barcos de madera en ese momento nuestra conversación se vio interrumpida por el sonido estridente del silbato de maniobra quedando un toque de atención se obligaba a formar encubierta lo más rápidamente posible bajamos la escala del castillo situada en cirugía y alineada perfectamente con la voladura y en escasos minutos toda la dotación del galatea aprendices aspirantes profesores suboficiales oficiales y jefes formaron en el exterior del buque toda la cubierta tanto a favor como a estribor desde prueba hasta el alcázar se cubrió en un santo amén por los uniformes azules coronado por el blanco de la prenda de cabeza un silencio sepulcral dejaba oír el crujir de la madera del velero en su leve balanceo producido por las lentas y suaves ondas de las verduras aguas que lo decían roto de vez en cuando por el nido de las gaviotas las leyes penales se celebraban los sábados por la mañana antes del descanso de fin de semana en este acto se leían los premios los castigos los arrestos y cualquier notoriedad que tuviese que ser conocida por todos tanto pretérito como futura incluso se daban a conocer ver igualmente algunas ordenanzas de la armada relativas a las conductas que no debían seguirse o simplemente como aviso de los preceptos infringido y las penas que podían llegar a aplicarse una vez finalizado el acto se podía abandonar el buque a excepción de los arrestados los castigados con trabajos y el personal de guardia como colofón la música de la salve marinera dio un respiro a la seriedad y rectitud de los implantes allí reunidos todos comenzamos a entonar salve estrella de los mares de los mares el deslumbrante sol reflejado por las quietas aguas de la ría y la blanca figura del galatea hacían aún más luminoso el entorno que unido a la perspectiva de dos días de libertad