
Descripción de The trader nº99 224e2w
Te regalo mi visión personal sobre el mercado, análisis, opinión y noticias. 🗓17-04-2025 -Evento: https://bit.ly/eventopablogilenmadrid -Filosofía Trader: https://pablogiltrader.com/blog/articulos/backtesting-trading/ -Articulo Cinco días: https://cincodias.elpais.com/opinion/2025-04-16/el-error-de-trump-con-el-deficit-comercial-cuando-la-politica-economica-ignora-la-realidad.html 5l1s1o
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Bienvenido a mi visión personal sobre la actualidad de los mercados financieros número 99. Mis claves. La reciente escalada arancelaria entre Estados Unidos y China no sólo responde a una lógica comercial. Detrás del nuevo proteccionismo impulsado por el presidente Donald Trump se esconde una estrategia más profunda. Preparar el terreno para una eventual confrontación con China, tanto en el ámbito militar como tecnológico.
Lo que está en juego no es simplemente el saldo de la balanza comercial sino el liderazgo global en un nuevo orden internacional donde la capacidad de producir, innovar y controlar sectores estratégicos se ha vuelto crucial. Trump ha dejado clara su intención de relocalizar la producción industrial en suelo estadounidense. Su argumento, la seguridad nacional depende de la capacidad de producir bienes estratégicos como antibióticos, microchips y equipamiento militar dentro del país.
Esta narrativa ha servido de base para imponer aranceles de hasta el 145% a productos chinos y grabar incluso a aliados tradicionales de Estados Unidos generando tensión no sólo con Pekín sino también con socios históricos como Canadá, Alemania, Japón o Corea del Sur. La estrategia ha sido criticada por muchos economistas y analistas internacionales quienes advierten que podría terminar debilitando el papel global de Estados Unidos al aislarlo comercialmente. Desde el otro lado del Pacífico, Xi Jinping ha reaccionado con una estrategia similar pero más silenciosa.
El programa, hecho en China 2025, busca reducir la dependencia de bienes y tecnología extranjera y consolidar una industria nacional robusta. Pekín ha apostado por el liderazgo en industrias clave como baterías de litio, inteligencia artificial, trenes de alta velocidad, semiconductores y tecnologías verdes. Al igual que Trump, Xi entiende que la autosuficiencia económica es un pilar de la soberanía nacional y su gobierno ha movilizado todos los recursos del Estado para lograrlo, desde subsidios hasta alianzas estratégicas con países africanos, latinoamericanos y del sudeste asiático.
Ambas potencias se han lanzado a una carrera por la supremacía industrial y tecnológica.
Mientras Estados Unidos endurece sus sanciones, bloquea exportaciones de tecnología avanzada y presiona a sus aliados para que hagan lo mismo, China redobla esfuerzos para ganar influencia en el sur global ofreciendo inversiones sin condiciones políticas, financiamiento a largo plazo y acuerdos bilaterales que fortalecen su presencia en mercados emergentes.
Esta competencia está reorganizando las alianzas internacionales y empujando a otros países a tomar partido o a buscar una difícil neutralidad que les permita no quedar atrapados en una nueva guerra fría. Más allá del ruido diplomático, el trasfondo es claro. Tanto Washington como Pekín se preparan para un conflicto que ninguno desea, pero que ambos consideran posible.
La militarización del comercio y la tecnología es solo una manifestación de esa tensión latente. El desacoplamiento económico entre ambas potencias ya está en marcha, con cadenas de suministro que se redibujan, empresas que relocalizan sus centros de producción y gobiernos que redefinen sus políticas industriales en función de objetivos geoestratégicos. Conclusión.
El resto del mundo observa con inquietud obligado a navegar entre dos gigantes cada vez más enfrentados. Las decisiones que se tomen en los próximos meses marcarán el rumbo de la economía global durante la próxima década. Y la pregunta ya no es si la guerra comercial puede escalar, sino hasta dónde están dispuestos a llegar Trump y Xi en su afán de imponer su visión del futuro.
¿Qué ha hecho el mercado en la última semana? La imagen presenta una tabla que muestra información sobre diferentes mercados financieros. En la primera columna están los nombres de los mercados, que incluyen el S&P 500, Nasdaq 100, Eurostox 50, Ibex 35, Oro, Brent, Gas Natural, SSE y Bitcoin. La segunda columna indica la fuente de datos de Google Finance para cada uno. La tercera columna muestra el cierre semanal de cada mercado. En la cuarta se detalla el cierre anual y en la quinta el precio actual. Además, la sexta columna presenta la variación porcentual de la última semana, mientras que la séptima indica la variación porcentual en lo que va del año.
Se observan variaciones tanto positivas como negativas, destacando que el oro y el gas natural han tenido incrementos en su valor reciente, mientras que el S&P 500 y el Nasdaq 100 muestran descensos tanto semanal como anualmente. ¡Imprescindible seguir! La debilidad del dólar es una señal de pérdida de confianza en Estados Unidos.
En las últimas semanas, el dólar estadounidense ha mostrado una notable debilidad que podría interpretarse como una señal clara de pérdida de confianza en los activos de Estados Unidos. Esta tendencia no solo tiene implicaciones en el tipo de cambio, sino que podría ser el inicio de una posible transformación estructural en la percepción del liderazgo económico norteamericano. Según datos de Bloomberg, muchos inversores están tomando precauciones ante la posibilidad de que el dólar siga cayendo.
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