Renegado del Cine T4E13 Mentes Peligrosas 07-03-25 1e194d

Bueno, estupendo, con este pequeño homenaje a Jim Harman y escuchando ese pequeño diálogo maravilloso del jovencito Frankenstein, pasamos a Antonio Castejo, el jovencito renegado del cine.

Bueno, ese jovencito te ha hecho un piropo, que te cagas.

Sí, sí. Un jovencito aquí...

Los 45 en la Segunda Juventud.

Exactamente, exactamente.

Vamos ya de camino a salir los jueves en busca de ligoteo por ahí.

Bueno, tú no, que estás casado.

Yo sí.

Bueno, pues te hicimos un encargo, bueno, son alumnos problemáticos.

No sé si tú estás más de la parte del profesor o más de la parte de los alumnos, que por la pinta que tienes yo creo que eres más de alumno problemático.

Sí, ¿verdad? Sí, sí.

Mentes peligrosas, la película, el encargo que te hicimos.

Y a ver qué tal, ¿qué te han parecido mentes peligrosas? Pues empieza mostrando un barrio marginal a unos adolescentes esperando el autobús para ir al instituto.

Bueno, adolescentes, adolescentes...

¿Cuántas veces ha repetido esa gente? Esa gente repite más que yo en un bufet libre.

No sabemos si van al instituto o al hogar de jubilados.

Compiten con los de gris a ver quién gana la pitanca.

Al acabar las clases quedan para ir a ver una obra.

Una obra de construcción, no de teatro.

La película protagoniza a Michelle Pfeiffer, que es una ex-marine a la que contratan para que dé clase y está basada en un hecho real.

Pero eso, basada, porque a la auténtica ex-marine, cuando vio la peli, no le gustó.

Así que estamos siempre igual.

Nunca le gusta a nadie, de verdad.

No sé ni cómo sigue existiendo esta industria.

Parece ser que dentro de un instituto normal tienen una clase donde meten a los que para ellos son los peorcitos de la sociedad.

Gente del último escalón social, gente problemática.

De aquí salen los ladrones, los traficantes, los repartidores de publicidad, lo peor.

Lo peor de la sociedad.

Y vemos que todos son negros o latinos.

¿No hay blancos americanos? ¡No hay! Ellos son mucho mejor que todo esto.

Y nunca, repito, nunca, se van a ver en esta situación.

Porque en esa situación se está por gusto, en la zona de confort de los negros y latinos, y los blancos americanos son cremita, canela en rama, el trocito final del cono del helado.

Y esta es una de las cosas que la ex-marine real criticó cuando vio la peli.

Que en su clase sí había blanquitos americanos.

¡Vaya! ¿Hay algún guionista por aquí que un poquito racista? ¿O es cosa de los productores? Esta gente supongo que solo comerá chocolate blanco.

Si juega a un ajedrez, nunca eligen negras.

Solo le gusta la música de Mike y Jason de los últimos años.

Cuando vean a un dálmata, se les cortó el circuito del cerebro.

Los productores, y esto no es cosa mía, dijeron que querían hacer una película 100% comercial.

¡Dicho por ellos, eh! Vieron que triunfaban las películas de profesores alumnos y dijeron que subiese al carro.

Cogieron el género, le quitaron todo lo artístico o menamente real e hicieron esta mierda.

Más mala que el café de máquina.

Repito, dicho por ellos, no es opinión, es un hecho.

Por cierto, el café de máquina era malo antes, pero ahora está más bueno que el de las cafeterías.

¿Qué está pasando con el café? Ya no está bueno en ningún sitio.

Eso sí, el estreñimiento de locura en medio segundo.

Algunas cafeterías tienen un cartel que dice aseo solo para clientes. ¡Claro, si tenéis cola! ¿Toma café? Tienes que ponerle salida de humo.

Una turbina de avión para extraerlo.

Lo peor de hacer una versión comercial de un hecho real es que algunos de los alumnos reales consiguieron encauzar su vida, prosperar, pero en las películas no, lo que demuestra que no les interesaba hacer cine, sino hacer cajas.

Es que así queda más dramático, entonces no es un hecho real.

Si te vas a poner a inventar las cosas, te nombran los protagonistas, creas una historia nueva...

No, es que si es un hecho real, vende más, pero que no lo es.

O lo es, o no lo es, pero no digas que lo es cuando no lo es.

Dice bien que Pirata del Caribe es un hecho real, que así vende más.

Visto esto, me dije, voy a ver lo que opina la gente.

Me puse a leer las críticas, tanto de profesionales como de público en general, y todos coincidían en lo mismo, miselface.

A esta peli le da una nota de pena, pero no era un cero patatero por miselface, que me había encargado.

Es la primera vez que me encargo de una peli que no tiene buena crítica.

Y, desde luego, tampoco se llevó ningún premio.

Los únicos premios que se llevó no fueron por la peli en sí, sino por la banda sonora.

Varias de las críticas que leí decían que no le daban un cero a por la canción de Julio, que nada tiene que ver con la trama.

Esto es como si te gustó el libro porque la autora sabe hacer tortillas de patatas.

Cuento un poco la peli.

Miselface llega a la entrevista de trabajo y la contratan directamente.

Ella titubea, pero le dicen el sueldo y le falta tiempo.

¡Qué vocación! La misma que la de los productores de esta peli.

Resulta que los profesores han tenido...