
La Mona Lisa no tiene cejas, pero las tuvo: una historiadora explica qué hizo Leonardo da Vinci con su Gioconda 1f1kz
Descripción de La Mona Lisa no tiene cejas, pero las tuvo: una historiadora explica qué hizo Leonardo da Vinci con su Gioconda 402w59
La Mona Lisa, también conocida como La Gioconda, es sin duda el cuadro más famoso del mundo, pero su fama oculta detalles fascinantes y poco conocidos sobre la obra y su autor, Leonardo da Vinci. En una reciente entrevista con la historiadora Ana Velasco en el programa Poniendo las Calles, se desvelaron algunos de esos secretos que rodean a esta icónica pintura. Ana Velasco explica que aunque hoy la Mona Lisa parece una imagen familiar, con su enigmática sonrisa y su rostro sin cejas, originalmente sí las tenía. “La Mona Lisa hoy no tiene cejas, pero las tuvo”, asegura Velasco, destacando que Leonardo, lejos de ser un pintor tradicional, se consideraba más un inventor y experimentaba constantemente con técnicas nuevas. Este afán por innovar llevó a que ciertos detalles, como las cejas, se borraran con el tiempo o incluso fueran eliminados intencionadamente. La historiadora apunta que el propio Leonardo llevaba consigo la obra cuando se trasladó a Francia, a la corte del rey Francisco I. “Una de las pocas obras que se lleva es la Mona Lisa”, comenta Ana, aunque reconoce que Da Vinci no estaba del todo satisfecho con el resultado final. La pintura se convirtió en una pieza clave para la cultura occidental, pero no siempre fue tan célebre como lo es hoy. “En 1911, la Mona Lisa no era el cuadro más famoso del mundo”, explica Velasco, añadiendo que su fama se disparó tras un acontecimiento dramático. En 1911, la Mona Lisa protagonizó uno de los robos más famosos y misteriosos de la historia del arte. Un carpintero italiano llamado Vincenzo Perugia, que trabajaba en el Museo del Louvre, decidió sustraer la obra. “Entró a las siete de la mañana, en un día con poca gente, y descolgó la pintura con un destornillador”, relata Velasco. Lo que parece una escena de película fue una realidad: Perugia se llevó el cuadro bajo el brazo y lo guardó en su casa durante casi tres años. Este hecho catapultó a la Mona Lisa a la fama internacional y abrió la puerta a todo tipo de teorías conspirativas, incluso se llegó a sospechar que artistas como Pablo Picasso estuvieran involucrados, aunque no se demostró. Picasso fue detenido brevemente, pero nada se probó en su contra, aunque años antes se le había investigado por la desaparición de otras piezas del Louvre. El cuadro fue recuperado cuando Perugia intentó venderlo en Italia. Se inició un juicio mediático donde el ladrón se defendió alegando un patriotismo italiano, afirmando que la obra debía regresar a su país natal tras haber sido expoliada. Finalmente, la Mona Lisa regresó al Louvre, donde hoy permanece protegida por un cristal antibalas y un sistema de seguridad exhaustivo. Desde entonces, la Gioconda ha sido objeto de múltiples intentos de daño y ataques simbólicos. Ana Velasco recuerda episodios como cuando alguien le lanzó una taza o una tarta vegana contra su vitrina. “Está protegida por un cristal antibalas, está metida en una especie de hornacina y rodeada de varias barreras”, explica. Además, la obra solo ha salido en contadas ocasiones del Louvre, para exposiciones internacionales en países como Estados Unidos o Japón, siempre bajo estrictas medidas de seguridad. El fenómeno cultural que representa la Mona Lisa, con su misterio, su sonrisa y su historia, sigue siendo objeto de estudio y iración, pero también de curiosidad por los detalles menos conocidos que Ana Velasco ha sacado a la luz. Esta mezcla de arte, historia y misterio es la que ha hecho de la Mona Lisa un icono eterno. 2k39h
Comentarios de La Mona Lisa no tiene cejas, pero las tuvo: una historiadora explica qué hizo Leonardo da Vinci con su Gioconda 32426o