Entrenamiento Invisible #4| Roberto Cubero 64y5s

Bienvenidos, bienvenidas a un nuevo episodio de Entrenamiento Invisible, el podcast donde charlamos con profesionales del ámbito del deporte. Hoy estoy muy contento porque tenemos a un invitado que además es amigo. Se trata de Roberto Cubero, jugador de baloncesto que actualmente milita en el SCASTELL de la Liga EVA. Si te gusta el episodio, no olvides suscribirte para no perderte nada y ahora sí, vamos con el invitado.

Y a partir de ahora ya lo que digamos queda grabado, ¿vale? Si luego hay algo que nos columpiamos me lo dices y se corta. Vale, pues nada, Roberto, bienvenido al podcast.

Gracias por pasarte, me hace mucha ilusión que estés aquí. Porque además, para la gente que no lo sepa, somos del mismo pueblo, nos conocemos y tal. Y nada, eso, gracias por pasarte por aquí. Bueno, gracias a ti, tío. La verdad es que nosotros nos conocemos prácticamente toda la vida y, hombre, es verdad que hemos trabajado juntos también un tiempo. Y, hombre, hay una amistad entre nosotros, tío. Y al final siempre sabes que es un placer, tío, echarte una manilla.

Muchísimas gracias. Bueno, pues para empezar, que tengo aquí la chuleta, ¿vale? Si me voy a mirar para abajo es porque tengo aquí la chuleta. Para quien no te conozca, ¿quién es Roberto y de dónde viene? Bueno, Roberto es un muchacho que juega baloncesto.

Bueno, nació en Baena, en Córdoba, igual que tú. Y bueno, que lleva ya tiempo, lleva mucho tiempo fuera de casa, desde los 16. Y bueno, ahora me encuentro aquí en Menorca jugando en Tercera G, lo que era antes de la Liga EVA, que es como, digamos, la cuarta liga de España, es un nivel semiprofesional. Pero bueno, con algo de experiencia también, sobre todo en filiales de equipos de Levoro y de Ligandesa. Pero bueno, un currante.

Intento ser un currante, intento ser una persona que trabaje mucho. Aparte, bueno, me estoy formando para ser preparador físico, rehabilitador de lesiones, ¿vale? Focado también en el rendimiento. Y sabes que también es, bueno, el mundo de la nutrición, de todo lo que hemos hablado, ¿no?, muchas veces. De psicología, nutrición, preparación física, todo eso que va un poco de la mano. Y sí que soy un poco friki de todo esto, ¿no? Así que...

Sí, sí. Me consta, me consta. ¿Y por qué Blon Sexto? ¿Por qué empezaste a jugar a Blon Sexto? Bueno, yo no... A mí no me gustaba de chico. Y siempre he sido el más grande de la clase. Siempre he sido el más grande de los niños, siempre he estallado por eso.

Y cuanto más me lo decían, parece que más escole cogía, ¿no? Y no quería jugar. Jugaba a fútbol, jugaba a tenis, lo típico de todos los niños, ¿no? De probar todas las cosillas.

Y hasta que mi hermano nos empezó a jugar y lo vi, y sobre todo el grupillo que había en el pueblo. Destacaba también mucho a Jorge Buitrago, a Carlos Pozo, a Andrés, a Dani, toda esta gente de Martín. Y... por si alguien de Bayern nos escucha, ¿no? Y...

Espero que sí, espero que alguien...

Y la gente... Es verdad, es verdad. Y es verdad que esa gente me enganchó mucho, tío. Me dio a conocer más que el deporte solamente, sino al final muchos valores, tío, que con la edad no te das cuenta, pero sí que valores de amistad, de esfuerzo, de... Y una cultura también, ¿no? El hecho de, bueno, acercarme también a lo que...

Bueno, el ir a jugar a un rato, a baloncesto, un rato, que era toda la tarde. Y echar un rato con tus amigos y al final, bueno, esos amigos con los que iba a jugar a baloncesto son ahora mi pandilla, digamos, ¿no? Y la mayoría de gente que tengo en mi vida ha venido a raíz de baloncesto, ¿no? Entonces, es algo muy grande.

¡Qué bueno! Sí, sí, totalmente. Al final el deporte no solo te da el hecho de practicarlo o dedicarte, ¿no? Al final, en tu caso, sino todos los amigos que te da, ¿no? Y toda la gente que conoces y todos esos valores que te transmite.

Hazme un breve repaso por tu trayectoria. Tú te fuiste de Bahena con 16 años, me has dicho antes, ¿verdad? ¿A jugar dónde? Yo me fui a Almería. Se hizo un proyecto para jugadores que querían dedicarse a esto, que querían ser un poquito más profesionales, digamos. Y me fui un año allí a Almería, después tuve un año en la cantera de Unicaja, en la que también guardo grandes amigos.

Y bueno, fue un gran año. Y después, bueno, esto va a tardar un rato, por si la gente lo quiere poner en por dos. Pero sí, bueno. Después tuve un año en Córdoba, en el equipo de la ciudad, el Córdoba Basque. Después, el año siguiente, fiché en Cazorla, que fue un proyecto que se truncó un poco a principios de temporada. Y un poquito antes de Navidad decidí dejar el equipo, por algunos problemas, cambio de entrenador y demás. Y terminó