CAPÍTULO 4 | El sentido del tacto | La huella y el abrazo 4y6i6i

La flecha amarilla viajes sonoros por las historias del camino de santiago capítulo cuatro el sentido del tacto la huella y el abrazo cuando se peregrina el tacto es la línea invisible que une y separa dos territorios dos pieles que se tocan la de quien viaja y la de la tierra que va pisando y tacto es también la huella misma de ese peregrino que mapea con su o el mun dado que se descubre á cada instante asi el camino es frontera porosa entre el caminante y su búsqueda pocos ejemplos más vivos de esta frontera fértil que los pies desnudos de kim viaja pies descalzos como los de catia que hace el camino por segunda vez desde alemania en esta ocasión en familia con su marido y sus dos hijos y han de diez años y siete y medio lo que co invierte el viaje en un doble proceso de aprendizaje caminar para mí es lo más natural decimos del ser humano somos nomal nómades toros y bueno estará en o con la naturaleza y bear tu camino es sentirlo con tus pies en el suelo para mí es lo más lo más sano digo yo y como tengo dos niños ahora y tengo que viajar quiero viajar tengo que señales como hace falta es que enseñarles un poco la forma cómo podrías viajar y bueno a ellos les gusta mucho y para viajar un poco más fácil ellos van en bici para estar un poco más más rápidos que nosotros para que podremos ir un poco más lejos cada día decimos así los caminos de catia han ido de lo episódico a lo profundo del entretenimiento a la transformación personal y en esta transformación difícil expresar el tacto de sus pisadas ha sido clave para desarrollar un nuevo modo de leer el camino no puedo explicarlo con mi cabeza no no hay una razón estoy a gusto caminar descalza y me me gusta sentir el calor del asfalto o el calor de la tierra notar si que era agua en el suelo si es seco me gusta sentir distintos materiales en el suelo pero no no es una explicación de la cabeza es un sentimiento decimos es sentía y saber dónde estoy es como leer el suelo digo yo explicándolo a ti ahora mismo me doy cuenta que es como lo de leer con los ojos leo con los pies los entornos por donde voy los caminos por donde voy estoy leyendo y empezaba a caminar descalza aquí en este albergue porque tenía la sensación tengo que quitarme los zapatos para estar en o con este sitio no sé si hay una cosa como energías de miles de años no sé si hay y a mí me da igual me siento bien así creo que hay una forma de energía sea en el suelo sea en los albergues sea en las iglesias no sé dónde está pero creo que que hay una forma de energía y como hay mucha gente que cogen estos caminos fijos decimos se mantiene la energía por supuesto energía en todos los sitios del mundo pero si pasa menos menos personas que era menos energía entonces igual por eso te sientas mejor en el camino de santiago