Alerta del Nuevo Orden Económico Mundial: "Nos hemos levantado de un gran sueño" | Entrevista en Capital Radio 2o3l5r

Sí, hoy nuestro invitado capital es Daniel Lacalle, una de las voces más influyentes de la economía europea, también en el mundo como doctor en economía, economista jefe en tresis y escritor. Aquí está, precisamente apareciendo con el recién publicado libro El Nuevo Orden Económico Mundial, que parece reflejar efectivamente lo que todos creemos y sabemos que está pasando. El mundo ha cambiado. Daniel, ¿cómo estás? Muy buenos días y bienvenido. Gracias por acompañarnos. Muy buenos días. ¿Cómo estás, Luis, gente? ¿Cómo estás? Creo que no has pensado mucho, repensado mucho el título del libro, ¿no? Porque estamos en un nuevo orden económico mundial, sin dudas. Efectivamente. Bueno, la idea del libro es explicarle a la gente qué es lo que está pasando, por qué aumenta el descontento entre los ciudadanos, por qué se está destruyendo el poder adquisitivo de las monedas, qué es lo que está ocurriendo a nivel geopolítico porque se están separando las potencias y que todo esto no es una casualidad, ¿no? Y que todo esto es parte de lo que es un movimiento en el que hay un gran problema.

Los estados se han acostumbrado a ser gastadores en vez de ser es. Entonces, nos encontramos con cero espacio fiscal. Los estados cada vez llevan a cabo más medidas de represión financiera, fiscal, etcétera, y todo eso tiene consecuencias. Y eso es lo que intento reflejar en el libro. Hay una visión, cierto consenso en que la globalización ha terminado y ha dado paso a este nuevo orden económico mundial de estados narcisistas, podríamos llamar. Miran primero por sí mismos y luego para los demás. Bueno, pero yo no diría que la globalización ha terminado. Lo que ha terminado es esto de el globalitarismo, que es esta idea de que se iban a juntar todas las grandes potencias e iban a llegar a acuerdos para perpetuarse en el poder sus gobiernos sin tener ningún tipo de, digamos, respeto a los problemas de cada uno de sus países y a las las preocupaciones de sus ciudadanos.

Yo creo que en la globalización, en cuanto a comercio, en cuanto a el avance de la tecnología, el avance de todo lo que está permitiendo que el sistema financiero sea cada vez más interconectado, todo eso no para. Y eso es imparable, de hecho. Lo que sí que se ha acabado es esa idea, esa idea que ni siquiera existió nunca, de que íbamos a tener a una China y un Estados Unidos y una Unión Europea, India, Rusia y Brasil, que iban todos a tener los mismos objetivos, los mismos proyectos y las mismas ideas, porque nunca han existido. Esto es importante. China, digamos, que se ha introducido en esa narrativa de una globalización en la que nunca ha participado. La economía china no ha hecho nada más que cerrarse desde el año 2008. Tiene todos los controles de capitales, controles de tipo de cambio, limitaciones legales, inversoras de seguridad jurídica, etcétera. Entonces, ¿qué es lo que pasa? Pues yo creo que lo que ha pasado es que nos hemos levantado de un gran sueño.

Nos hemos levantado y nos hemos dado cuenta que eso era un espejismo, que no había ningún oasis al final, que era un espejismo de una idea que en realidad nunca se llevó a cabo. Y lo que estamos de vuelta es a lo que siempre ha existido, que son potencias que tienen sus propios intereses, que cooperan entre ellas, pero que desde luego no van de la mano cantando canciones de John Lennon. ¿Cuáles dirías, Daniel, que son las nuevas reglas de este nuevo orden mundial? Bueno, las nuevas reglas, desafortunadamente, son las de intentar que los ciudadanos cada vez tengan menos capacidad de llevar a cabo sus proyectos individualmente. El control social, la utilización de la moneda, de la tecnología y de la legislación para limitar la libertad individual, la libertad económica y la libertad empresarial. Es, en realidad, intentar perpetuar estados omnipresentes que se disfrazan de estructuras democráticas y que utilizan los mecanismos de la sociedad civil y de las estructuras y las instituciones democráticas para dinamitarlas desde dentro. Pero, claro, lo positivo, lo que digo en el libro, lo que muestro en el libro, es todas las razones por las que