4x10. Debate sobre la autoedición: ¿Círculo Rojo o edición convencional? 6a3e1n

Los Inquilinos de Baker Street, un podcast de Círculo Rojo con Alberto Cerezuela y sus secuaces.
¿Qué tal, amigos? ¿Cómo estáis? Como decía la famosa frase célebre de 1 a 1, como decíamos ayer,
aquí estamos de nuevo en Los Inquilinos de Baker Street con un nuevo podcast en directo y,
como siempre, acompañado de mis queridos Óscar Fàbrega, a mi derecha. Nunca he estado a la
derecha, pero hoy sí. Buenas tardes, señor Alberto Cerezuela. Y Madeleine Sánchez. Hola,
buenas tardes. Que hemos conseguido que no esté haciendo deporte esta tarde y venga con nosotros
a grabar este podcast. En horario de trabajo... Es un logro. En horario de trabajo no puedo hacer deporte.
Yo no lo descarto. Claro que tenga debajo de la mesa una maquinilla de esas que hace deporte con los pies de la gente.
El reloj me marca 14.000 pasos. Bien, bien. No, y es que hemos dicho que hay palomitas y cerveza y la
pobre está cada vez más lejos de las palomitas y de la cerveza, pero bueno. No pasa nada, no pasa nada.
Bueno, que estamos de vuelta después de este medio parón navideño que hemos hecho de los
podcasts en directo. ¿La Navidad bien, no? Bien, bien. Muy bien. Me han traído un montón de cosas los Reyes.
¿Ah, sí? Sí, me las he comprado yo en las rebajas. Bueno, lo importante es recibir. Sí, la verdad que sí,
me conozco muy bien. ¿A ti qué te han traído, Óscar? Es que, como soy republicano, no me traen demasiadas cosas,
pero bien, bien. Está bien, han cumplido. Y bien, la Navidad ya pasa un mes, ¿no? O más. Estamos ya más cerca de las
siguientes que de estas. Bueno, estamos en la cuesta de enero, casi. La terrible cuesta de enero, casi que está
terminando la cuesta de enero. Bueno, pues estamos en este podcast que venimos un poco guerreros, ya lo
hemos advertido. De hecho, vamos a hablar, vamos a decir verdades como puños, ¿verdad? Sí, y para ello hemos
traído un invitado de excepción, quizás el autor, bueno, quizás no, el autor que más libros vende de
Círculo Rojo. Nuestro bestseller particular, que además es buen amigo, una persona entrañable que se hace
querer, que forma parte de esta familia, como el que más, y que creo que simboliza lo que significa la
autoedición. ¿Te he presentado bien, Fra López Castillo? Yo creo que me has dejado hasta bien de más.
Te he rendido bien, bien. No, es que de verdad eres el ejemplo de la autoedición, porque muchas veces cuando,
bueno, cuando hablamos con escritores, cuando nos llegan proyectos, yo te tengo siempre en mente,
porque es que hace, y no es por hacerse la pelota, no lo necesitamos, hace lo que yo creo que
todo autor que se autoedita debe hacer, que es un poco lo de Juan Palomo, yo me lo guiso, yo me lo
como, que para eso uno se autoedita. Claro, es que para mí, por ejemplo, autopublicar conlleva eso,
coger todas las fases del proceso, desde la publicación hasta que llegue el libro a tus
lectores, encargarte tú de todo. Claro, luego tiene el beneficio de que a la hora de venderte llevas todo,
pero también tienes que soportar todos los gastos y todo el trabajo que conlleva, y eso es lo que
muchos autores a lo mejor, a la hora de autopublicar, pues piensan, es que autopublicar es peor, es que es mejor que
editor tradicional. Yo no estoy de acuerdo, eso tiene unas posibilidades a día de hoy, con las redes
sociales infinitas, en mi opinión infinitas. Al final yo creo que es, y me parece que Óscar que está
en esta mesa, que creo que ha probado todas las formas de publicar que existen, al final es un
poco lo que tú quieras con tu proyecto, pero tienes que tener claras las premisas en cada una de las
opciones. Sí, porque a ver, al final lo que comenta Fran es aplicable a la autoedición, evidentemente,
pero también aplica a la edición tradicional, luego hablaremos con él también de su experiencia con la edición
tradicional, que al final también requiere una inversión en cuanto a horas, estrategias y costes
varios por parte del autor, que no se daban quizás antes la edición tradicional. Yo creo que muchos
autores equivocados se piensan que porque una editorial tradicional apuesta por tu obra ya está
todo hecho, van a ponerte un anuncio página completa en todas las revistas y en todos los periódicos del
mercado, y eso no es así. La edición tradicional y encima estos grandes grupos, por ejemplo con el que
él ha estado, que es Penguin, con el que estoy también yo, que es Planeta, al final tienen miles de autores a los que
realmente desatienden, porque con muy pocas ventas garantizan el beneficio de lo que han invertido en
adelantos y demás en el autor y tampoco se preocupan mucho. O sea, quiero decir al final que la autoedición,
lo tengo cada vez más claro, con el mismo esfuerzo quizás por parte del autor, excepto también
en el tema de logística, de enviar libros y demás o de moverse, igual es eso un poco más, pero al final
creo que merece la pena en relación al coste que hay que emplear respecto al beneficio que acaba
generando la autoedición, lo tengo muy claro, y sobre todo cuando alguien ya tiene un renombre,
o sea yo me imagino, no sé, iba a decir este, bueno venga lo digo, un autor como Berreverte, por ejemplo,
que lo veta de mala manera en ventas, si ese hombre por ejemplo decidiese pasar de una edición