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Un espacio para caminar con Jesús Tips para discernir la realidad Viernes 23 de mayo de 2025 Por: Antonio Pérez Esclarín Su cariño maternal Mayo es el mes de la madre, de las flores y es también el mes de la virgen, la flor más bella en el jardín de nuestros corazones. Además en mayo celebramos el día 13 la festividad de Nuestra Señora de Lourdes y el 24, es decir mañana, la fiesta de María Auxiliadora o auxilio de los cristianos. Si bien, esta advocación se remonta a los primeros siglos del cristianismo, pues conocemos que así la llamó san Juan Crisóstomo en el año 345, fue san Juan Bosco, el fundador de las congregaciones salesianas, quién más contribuyó a extender la devoción a María Auxiliadora. Según Don Bosco fue en el año 1860 cuando la virgen le manifestó su deseo de ser honrada con dicho título y su voluntad de que se le construyera un templo, deseo que se concretó con la construcción de la bellísima Basílica de María Auxiliadora, en Turín. La extensión de las obras salesianas por los cinco continentes propagó por el mundo la devoción a María Auxiliadora, siempre dispuesta a protegernos en los problemas, comprendernos y brindarnos su cariño maternal. Por ello, en estos tiempos tan inciertos y difíciles que vivimos debemos encontrar en María auxilio en los peligros y problemas y fuerza para sobreponernos a las dificultades, inseguridades y miedos. Con Tu presencia Señor, saldremos fortalecidos. 3i2r5v
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Mayo es el mes de la madre, de las flores y es también el mes de la Virgen, flor más bella en el jardín de nuestros corazones. Además en mayo celebramos el día 13 la festividad de Nuestra Señora de Lourdes y el 24, es decir mañana, la fiesta de María Auxiliadora o Auxilio de los Cristianos. Si bien esta invocación se remonta a los primeros siglos del cristianismo, pues conocemos que así la llamó San Juan Crisóstomo en el año 345, fue San Juan Bosco, el fundador de las congregaciones alesianas, quien más contribuyó a extender la devoción a María Auxiliadora.
Según Don Bosco, fue en el año 1860 cuando la Virgen le manifestó su deseo de ser honrada con dicho título y su voluntad de que se le construyera un templo, deseo que se concretó con la construcción de la bellísima Basílica de María Auxiliadora en Turín. La extensión de las obras salesianas por los cinco continentes propagó por el mundo la devoción a María Auxiliadora, siempre dispuesta a protegernos en los problemas, a comprendernos y brindarnos su cariño maternal. Por ello, en estos tiempos tan inciertos y difíciles que vivimos, debemos encontrar en María auxilio en los peligros y problemas y fuerza para sobreponernos a las dificultades, inseguridades y miedos.
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