
Descripción de Un extraño suceso en el Almudena Grandes 2g7224
El Pasillo Verde nos va a contar lo que ocurrió el 13 de enero en el Almudena Grandes a las 12.05 de la mañana. ¡Mucha atención que esto solo acaba de comenzar! 281l5q
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
Bienvenidos a El Pasillo Verde, un podcast escolar donde hablaremos en cada episodio sobre diversas temáticas que nos interesan dando voz a la obra moderna.
Yo soy Lola de sexto de primaria y soy una de los integrantes de este equipazo.
A continuación se van a presentar el resto de compañeros y compañeras del Pasillo Verde.
Hola, soy Hugo y me encanta el deporte. Mi deporte favorito es el fútbol.
Hola, soy Ángel y a mí me encanta tocar la trompa.
Hola, soy Josué y voy a ser piloto de mayor porque sé todo sobre los aviones.
Hola, soy Cristina y me encanta dibujar.
Hola, soy Ariel. Mi padre me ha dicho que mi nombre me lo puso por un amigo sudo francés.
También sé tocar el piano y me llamo Ariel, no Ariel, hay confusiones.
Queridos oyentes, os estaréis preguntando el porqué del nombre de El Pasillo Verde.
No tiene mucho misterio. Verás, pues bueno, en nuestro pueblo cada pasillo está pintado de un color.
El pasillo del tercer ciclo, este color verde, y como todos estamos en sexto, pues estamos todos en el verde.
De ahí el nombre del podcast. Además, este color representa a los tipos de fútbol de la zona marina.
El Real Betis va a los pies.
¡Mucho Betis, mucho Betis! ¡Eh! ¡Eh! Hoy en El Pasillo Verde vamos a contar lo que fue yo el 13 de enero en el Almudena Atlántes a las 12 y 5.
Los integrantes del Pasillo Verde se estaban preparando para el podcast.
¿Vamos a empezar a hacer el podcast? ¡Sí! Los seis se asomaron a la ventana.
Acaba de caer una piedra del cielo.
De hecho, es un asteroide de un metro cuadrado de diámetro.
O suavecito, mirad el teleómetro.
¡Es que estás celoso! Vamos a dejar de pelearnos y vamos a fijarnos en el pedruzo que acaba de caer del cielo.
La Seña Marina estaba a punto de entrar cuando la Seña Angelina la formificó en la puerta del podcast.
Del Pasillo Rojo, ya que ella había estado en o con este pedruzo infectado.
¡Que la casa da la seña! Si mis cálculos no fallan, la Seña de Música ha zombificado a la Seña Marina porque...
Sí, os lo dejaré. Seguro, seguro. Será eso.
¡Venga, vámonos de aquí que yo aprecio mi vida! ¿Qué hacemos? No podemos escapar con dos gomis en la puerta.
Mirad eso que está ahí en el techo, llamado Conducto de Ventilación.
Podemos apilar una cuantasillas y subimos.
¡Ostras, qué buena idea! Los integrantes del Pasillo Verde se aproximaron al Conducto de Ventilación cuando oyeron un sonido estrepiloso.
¡Vámonos de aquí! Cuando todos se alzaron en el Conducto de Ventilación, de repente a Ángel, que fue el último de entrar, los mordió con un golpe.
¡En la pierna! ¿Estamos todos salvos y salvos? ¡Sí! Los niños y niñas del Pasillo Verde no se habían dado cuenta de que Ángel estaba infectado.
Siguieron su camino por el Conducto de Ventilación y se encontraron en un mapa pegado al techo que les llevaría hacia la cura.
¿Qué es eso? Parece un papel viejo.
¿Qué dices? Es un mapa.
Marca varias pistas. Vamos a la primera.
La primera pista indicaba la sala de ordenador, pero antes de llegar a ella, en los Conductos de Ventilación, se encontraron a varias personas convertidas en zombis.
Consiguieron esquivarlos, pero por muy poco.
Sin embargo, llegar a las salas de ordenadores les iba a resultar un poco difícil, ya que ellos se ubicaban en la segunda planta del colegio, mientras que en la sala de ordenadores se encontraban en la última planta.
¡Venga equipo, que ya queda poco! Ya estaban llegando a la última planta, cuando se encontraron a dos zombis.
Sin embargo, no tienen muchos problemas, porque los zombis estaban distraídos.
¡Ya hemos llegado! De repente, comenzaron a ver en la sala de informática un ordenador encendido con unos números.
¿Qué es eso que sale en el ordenador? Parece una contraseña. Dígame qué tal el ordenador. Cristina, díctamela.
Vale, nueve, seis, dos, ocho, cuatro, noventa y cinco, ochenta y nueve, setenta y dos, cuarenta y uno.
¡Toma ya! El ordenador se ha desbloqueado y hay un mensaje para el pasillo verde que dice lo siguiente.
Tenéis que dirigiros al habla de quinto B, allí encontraréis más respuestas.
Todos se dirigieron a la clase de quinto B, pero la puerta estaba cerrada.
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