S.O.S. - CREENCIAS y PENSAMIENTOS LIMITANTES | 4 ht62

No siempre somos dueños de nuestras decisiones. Espero que tú sí lo seas al escuchar este podcast.

Y también espero que al terminar este episodio seas un poco más consciente de lo que ocurre en tu cerebro. Porque de eso va el episodio de hoy, de conocerse mejor, de mirar hacia dentro de ti y ser, en definitiva, un poquito más libre. Un saludo de quien te habla, Rodrigo Díaz. Comenzamos.

Aquí estamos una semana más con Alejandra, con Marta y un servidor. Os quiero contar una situación que viví ayer totalmente sin contexto. Yo escuché la siguiente frase de una conversación entre dos señoras. Y una decía a la otra algo así como, pues dile que no esté preocupado y que disfrute, que pudiendo disfrutar no está disfrutando. Entonces yo quiero hacer una pregunta. La idea de hay que disfrutar siempre a toda costa es una creencia limitante.

Lo considero un pensamiento tóxico en tanto que hay que aceptar lo bueno y lo malo de la vida, pero no lo considero una creencia limitante como tal. Yo estoy de acuerdo. Vale. A ver, es que llevo, desde que decidimos hablar de esto, llevo dándole vueltas. Entonces lo que me resonó en la cabeza fue algo así como, y si yo estoy pasando un proceso de depresión o estoy triste un día porque me apetece y ese día es mi cumpleaños a lo mejor y quiero estar triste, quiero estar tirada en la cama y tengo que disfrutar.

Claro, yo en ese caso lo asocio más con lo que conocemos entre nosotros como positivismo tóxico, en tanto que siempre tienes que estar sonriendo, siempre tienes que tirar para adelante, todas las cosas buenas que tienes en vez de, ya no solo porque en este caso el ejemplo que tú has puesto sea una persona que está pasando por una depresión que implica el proceso que implica, sino a lo mejor porque has tenido una pérdida, porque algo simplemente no te ha salido bien y no tienes el día.

Pues la gente no tienes que ser feliz y mira todo lo que tienes a tu alrededor y tienes que sentirte afortunada. Bueno, no soy una persona afortunada, pero es que hoy me siento mal y hablando mal y pronto me siento la mierda. Quédate ahí un ratito, si es verdad que no arrastres ese estado porque evidentemente te termina afectando, pero el no aceptar, como ya hemos venido hablando en otros episodios, el no aceptar el estado emocional en el que te encuentras, nada bueno va a traer. Claro, o como por ejemplo cuando estás embarazada.

Yo recuerdo mucho a mi embarazo que fue en el peor momento de mi vida, la verdad, porque estaba empezando un negocio y justo me enteré que estaba embarazada, entonces todo el mundo me decía lo mismo, pero disfruta, si es lo mejor que te va a pasar en la vida y es como no, no puedo disfrutar, o sea, estoy creando un negocio que me genera muchísimo estrés en este momento y no puedo decir que no ni una cosa ni otra y tampoco quiero, entonces el tener que disfrutar de toda la vida, o por ejemplo, porque claro, tú has dicho que te dicen que tienes que disfrutar de todo porque eres afortunado, yo he visto casos en los que la persona tiene una vida de auténtica tortura y aun así te dicen, pero disfruta porque al menos estás vivo, o sea, es terrible, pero porque hay que disfrutar, o sea, yo creo que hay de todo, para algo están las emociones, las emociones tienen una funcionalidad y no siempre puedes estar bien, no siempre puedes estar mal, no siempre puedes estar enfadado, o sea, todo en exceso es malo, exacto, como las dietas, lo mismo, entonces si estar, que no se preocupe es una creencia limitante, yo lo veo más como un pensamiento limitante, más que como una creencia, creencia o pensamiento, sí, y ahí vamos, antes de seguir profundizando, ¿podemos definir un poco qué es un pensamiento o creencia limitante? Sí, las creencias limitantes son aquellas ideas que supuestamente tienes tú, pero que en el fondo, si te paras a analizarlas, no son tuyas, son impuestas o heredadas o aprendidas y en el fondo te causan más tarde o más temprano un malestar, por ejemplo, tengo que llegar siempre a tiempo, ¿vale? O sea, el ser puntual, sería lo cortés, pero luego hay como un pasito más que cuando tú no llegas a tiempo porque se te encontraste con un atasco por un accidente, eso te genera un malestar tremendo, entonces ahí ya no podríamos hablar de creencias limitantes, por ejemplo. ¿Y cuándo empieza verdaderamente la limitación? Por un pensamiento.