El Otro México: Palenque 6x3c3o

Y húmedas de tabasco donde los primeros montes del estado de chiapas rompen el paisaje ya la selva un manto verde y tupido refugio de monos serpientes guacamayos que se extiende a ambos lados del río usumacinta hacia el sureste a ciertos ya cada metro más apretada y peligrosa y era así antes igualmente hostil para el hombre sin embargo ellos los mayas la dominaron abriendo en su espesura hueco para construir ciudades y levantar templos como si esta selva fuera su aliada y en cierto modo lo fue porque cuando ellos se marcharon movidos por razones que aún desconocemos la selva fue quien guardó cuanto dejaron ocultando sus edificios a los ojos de saqueadores y profanos permitiendo así que mil años después los hombres de ahora contemplemos sus ruinas aún erguidas escudriñemos con la cámara sus secretos secreto él sólo en parte desvelados como corresponde a una cultura tan desconcertante y misteriosa aquel día húmedo y sofocante habíamos colocado en nuestras cámaras en uno de los más importantes centros ceremoniales de los mayas una ciudad santuario donde el arte y la mística alcanzaron un nivel que no ha sido igualado palenque un lugar fuera del tiempo alejado de cualquier ruta cuyo auténtico nombre aun desconocemos a unos ocho kilómetros hay un pueblecito que fundaron los dominicos en mil quinientos sesenta y cuatro santo domingo de palenque llamado así en honor del santo y por la empalizada que alrededor levantaron los españoles para defenderse de los indios hostiles que en esa zona eran atlante y aguerridos por esa razón que no por otra se da las ruinas el nombre de palenque ya que ignoramos como llamaban los mayas a la ciudad tampoco hay acuerdo sobre la fecha en que se construyeron los primeros edificios pero sí se sabe que el lugar estuvo habitado hace al menos dos mil trescientos años y que alcanzó su mayor apogeo en el siglo séptimo estos templos fueron construidos cuando la cultura maya estaba en su máximo esplendor en la misma época en que gran parte de europa estaba ocupada por los bárbaros y mahoma se dedicaba a difundir una verdad nueva por todo el norte de áfrica una época en la que en el viejo mundo se vivía en plena oscuridad y aquí en el corazón de la selva chiapaneca un pueblo de artistas y astrónomos daba lo mejor de sus conocimientos como el cisne era su más hermoso canto antes de morir pues sí poco tiempo después las gentes de palenque se marcharon abandonando templos y palacios para que la selva recuperar un terreno que le pertenecía y cubriera las piedras y relieves las escalinatas y los estucos con su camuflaje verde y así la ciudad sagrada cayó en el más profundo olvido hernán cortés pasó por la región el siglo dieciseis y no supo de la existencia de palenque porque ni los propios mexicanos de entonces conocían las ruinas la selva aguardó durante siglos su secreto y en parte lo sigue guardando porque sólo una treintena de edificios han sido rescatados aún quedan más de cuatrocientos templos atrapados por gigantescos árboles y una maleza impenetrable resulta demasiado costoso abrirse paso hasta ellos