Mindfulsex con Ana Sierra - Hablemos de... Sexualidad 1d4u27

¡Muy buenos días! Bienvenidos a un nuevo episodio de Sonidos de Psicología. Bienvenidos al podcast del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid. Yo soy Julio y en otro programa más de Hablemos de Sexualidad, con el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, pues tenemos la suerte de encontrar con Ana Sierra, que es psicóloga sanitaria, sexóloga clínica, es escritora de libros y además comunicadora tanto en redes sociales como en medios de comunicación y experta en MindfulSex, que es el tema que venimos a abordar hoy. Hola, Ana, muchas gracias por venir.

Hola, encantada de estar aquí. Gracias a vosotros.

En estos programas estamos abordando toda la sexualidad desde el punto de vista de la psicosexología clínica, tanto desde estudios e investigaciones hasta las entrevistas o las colaboraciones de expertos en muchos temas. Y bueno, el MindfulSex quizás es un término que no es muy conocido, que quizás no todo el mundo ha oído hablar de él. ¿Podrías explicarnos qué significa? Porque parece la unión de mindfulness y de sexualidad.

Efectivamente, la raíz es el mindfulness, que al final es la toma de la consciencia plena, la atención plena y viene también de la meditación yóica. Al final es como occidentalizado, por así decirlo, para que podamos aplicarlo a nuestro día a día, incluso en terapia, como metodología para trabajar eso, lo que sucede en el presente, sin irnos al futuro ni al pasado necesariamente, pero también en algún momento.

¿Se aplica esto entonces en toda la sexualidad, no solo durante la pura relación sexual o las relaciones de estimulación genital o de penetración, sino durante toda la experiencia de la sexualidad y el erotismo? Exacto. Es la aplicación de ese mindfulness a la sexualidad, pero efectivamente no solo genital, sino desde que nacemos hasta que morimos en todas las áreas de nuestra vida. Porque al final yo siempre digo que no dejamos nuestra sexualidad colgada en una percha para irnos a trabajar ni para ir a comprar el pan. Va con nosotras porque, como bien sabes, son emociones, son vínculos, son pensamientos, creencias.

Son formas de relacionarnos conmigo mismo y con el mundo.

Exacto. Y al final es un trabajo desde el yo, desde cada persona, hacia el exterior también porque somos seres sociales y, evidentemente, aunque no queramos mantener relaciones sexuales como entendemos habitualmente, genitales o de desnudez, incluso la sexualidad va a estar ahí y va a funcionar de otra manera, pero es algo inherente al ser humano.

Al final, el mindfulness es algo que es cierto que lleva ya bastante tiempo. Por supuesto en la cultura oriental, en ciertos aspectos desde hace mucho más tiempo, pero aquí quizá desde los inicios de las terapias de tercera generación y todo ese trabajo de los ochenta y de los noventa. Pero esa aplicación o ese desarrollo del mindfulness aplicado a la sexualidad más o menos ¿de dónde surge? ¿Cómo surge? Y más o menos ¿cuáles son esos fundamentos? Porque quizá mucha gente tiene asociado al mindfulness a este concepto un poco más de meditación, de relajación, incluso más desde un punto quizá desactivante.

Claro, al final yo creo que viene de la necesidad de hablar de sexualidad desde otro punto de vista que no es simplemente el erótico o incluso el del coitocentrismo, del finalista, de siempre alcanzar el orgasmo. Una necesidad de que forme parte de nuestra vida de forma positiva.

Pero bueno, en el mindfulness también nos encontramos cosas que no nos hacen gracia, porque tomamos precisamente consciencia pero sí de vivir nuestra sexualidad de manera coherente a lo que realmente deseamos, no lo que nos han contado que tenemos que desear o nuestro proceso de erotización de la vida y de las relaciones sexuales, pues que estamos como repitiendo patrones que no nos quedan a medida. Al final es un cuento que nos han contado y tenemos que deconstruir ese cuento para crear nuestra propia historia sexual. Y bueno, en mi caso viene de la necesidad de hablar de unas...