Incriminados 1x02 - ARQUITECTURA DEL CRIMEN 1z1f56

Estamos grabando… A ver si estamos grabando, sí.

No vaya a ser que la lié y hoy falle… No, no, si salía.

Ponía Recording in Progress.

Recording in Progress. Muy bien, pues vamos a por ello.

Bienvenidos, incriminados.

Hoy nos metemos directamente con un tema de crimen.

No sé si alguna vez vamos a tratar un tema de crimen tan de crimen como este, porque literalmente nos vamos a meter hasta la cocina.

Vamos a hablar de gente que se lleva el trabajo a casa, como podemos ser nosotros, como somos los autónomos.

¿Qué tal, Iván? ¿Qué tal, Rodrigo? Pues sí, a ver… Todo el día acuestas, macho, el trabajo.

Tú lo sabes, yo tengo mi oficina hasta en el coche.

O sea que… Es un buen ejemplo.

Tienes la oficina en el salón.

Bueno, en casa, por lo que veo, tienes la oficina donde te dejan.

Donde me dejan, donde me dejan.

Cada vez tengo una esquinita, pero, oye, acogedora.

Se está bien.

Se está bien, pero si te dedicaras al crimen, lo tendrías más complicado.

Te dejan un rincón por el que pasa por el mundo.

Tendrías que estar toda la familia incriminada, mejor dicho, en el rincón.

Sí, pero todo se puede hacer.

Todo es cuestión de porés.

Exacto.

Bueno, a ver, antes de que se me olvide, nombrar al autor de la música que estáis escuchando al principio del programa, que el otro día olvidé nombrarle.

Antonio Marín, el que quiera curiosear por ahí lo que tiene en Internet, tiene un perfil en YouTube que se llama EJ0, así tal cual como suena.

Tienes curiosidad por saber qué más ha compuesto este hombre.

Y segundo tema que iba a comentar, pues mira, ahora mismo se me ha olvidado.

Empezamos bien.

Ah, bueno, sí, que este programa por poco también se retrasa porque nos ha pillado también la enfermedad por medio.

No paramos de tener problemas, pero lo hemos conseguido.

Bueno, a ver, vamos a hablar de gente que se lleva el trabajo a casa, de asesinos que se llevan el trabajo a casa.

Volvemos a reiterar lo de que no queremos darle ideas a nadie, que nadie diga que esto es un programa para incitar al crimen.

Esto es un programa para documentarse.

Igual que nosotros somos escritores y nos documentamos sobre ello, entendemos que a vosotros os ponen interés a estos temas.

Estoy seguro de que Iván tiene preparados un montón de casos de este tipo, de gente que traía el trabajo a casa o preparaba su casa para hacer esas fechorías, pues eso, indoors, porque el título del programa viene de ahí, de arquitectura del crimen, de cómo preparaban los lugares en los que vivían, o a lo mejor no era donde vivían, era un lugar separado que tenía específicamente para eso.

No sé muy bien por dónde quieres empezar, Iván, si por el caso más antiguo...

Bueno, yo el primer caso, quizás es uno de los más llamativos, está relacionado con el primer asesino en serie, por lo menos documentado, de Estados Unidos.

Es H. H. Holmes, Henry Howard Holmes, que es un médico que empieza ya bastante pronto con temas criminales.

No a nivel de asesinatos, pero sí a nivel de estafas.

Lo que hace es intentar hacer una fortuna bastante grande para lo que va a venir después.

Es decir, estafa a aseguradoras, que era algo muy habitual, buscaba cualquier método para estafar a las aseguradoras, estafaba a mujeres, porque era un hombre muy atractivo, además con un don de gentes muy grande.

Y después empieza a regentar una farmacia, que aquí hay una de las primeras leyendas relacionadas con este personaje.

En teoría, la realidad dice que los propietarios lo contratan, se jubilan y lo que hace es comprar la tienda, comprar la farmacia y entonces la lleva adelante hasta obtener el dinero que necesita para hacer un edificio realmente colosal.

En la leyenda dicen que lo que hace es que asesina a la dueña, que es Elizabeth S. Holton, pero parece ser que no es cierto.

Una vez que incluso fallece, porque vamos a hacer spoilers, H.H. Holmes ya parece que sigue viva, o sea que no tiene nada de real, parece lo del asesinato.

¿Para qué quiere este dinero? Pues para en Chicago ordenar construir un edificio, como digo, colosal.

O sea, algo nunca visto en la zona.

Es decir, un edificio que ocupa una manzana entera, que además parece una fortaleza medieval, hasta el punto de que le llaman el castillo, el chateau de Castle.

Y bueno, y en apariencia, él lo que quiere es alquilarla habitaciones.

Habitaciones, porque tiene más de 60 habitaciones, o sea, es un edificio grande.

Además, pilla toda la zona, la zona inferior del edificio la pone de comercios.

¿Para qué? Para disimularlo.