EP 27 - El testimonio de Raquel 6e366n

A Tarragona Radio, Porta a la Esperanza.

Muy buenos días, estáis escuchando un nuevo episodio del programa Porta a la Esperanza, en Tarragona Radio y plataformas digitales como Spotify y iVoox.

Gracias por elegirnos y escucharnos.

Nuestro objetivo principal es poner sobre la mesa temas cristianos relevantes y que te sientas cómodo, reflexiones y formas tu propia opinión sobre tu fe y tu relación personal con Dios.

Prepárate que ya empezamos.

Ya sabes que yo soy Julia, la presentadora del programa de hoy.

Y en este nuevo episodio vamos a poder escuchar el testimonio de Raquel Millar.

Buenos días Raquel, ¿cómo estás? Hola, buenos días Julia. Pues muy bien, muchas gracias por la invitación.

Gracias a ti por venir una vez más, que ya te tuvimos el año pasado.

Y la verdad que es un placer tenerte.

Raquel es miembro de nuestra iglesia aquí en Tarragona y estamos muy contentos de que venga a contarnos su historia.

Pero antes de entrar más ahí a saco con tu testimonio, quería hacerte unas preguntas para que los oyentes te puedan conocer mejor.

Así que si quieres hablarnos un poquito de ti, de dónde vienes, qué edad tienes, a qué te dedicas, un poco de tu experiencia vital.

Vale. Pues bueno, soy Raquel, soy de Zamboy, tengo 32 años y bueno, estoy casada con Óscar, que también viene a esta iglesia, desde hace más de 10 años.

Y bueno, actualmente me dedico a cuidar de mis tres hijos, que son Joel, Julia y Daniel.

Y bueno, antes de eso estudié el grado de Relaciones Laborales y Empleo y he trabajado como Recursos Humanos hasta que he sido ama de casa solo.

Y bueno, soy hija de Rubén y Nieves, mi padre es pastor y mi madre siempre ha estado en casa también, cuidándonos.

Y hermana de tres, de Rebeca, Samuel y Marc.

Y bueno, estos dos últimos son adoptados, uno en Nicaragua y el otro aquí en Cataluña.

Y yo creo que lo que me ha identificado siempre en estadística, cuando estudiaba estadística en la universidad, había una palabra que me hacía mucha gracia que era la moda.

La moda era el valor que aparece con más frecuencia en algo.

Y nos estudiaron a nosotros mismos para ver lo que era la moda y yo siempre salía la última en todo.

Porque es raro, ¿no? Tener cuatro hermanos, hija de pastor...

Bueno, esa es un poco la definición.

Creo que la verdad es que con todo lo que has explicado te podemos conocer un poquito mejor.

¿Cómo te definirías en tres palabras? Bueno, no se me da muy bien sintetizar, ya lo vas a ver durante todo este ratito.

Así que he puesto tres frases.

Tímida pero sociable, igual no tan tímida ahora, pero sí hace un tiempo.

Insegura pero con valores muy firmes y pesimista pero fácil de contentar.

¡Me encanta! Me encanta porque es como una de cada una, ¿verdad? Sí.

Muy bien.

Y así para acabar con las preguntas que llamamos nosotros así de rompehielo.

¿Cuáles son tus hobbies que te gusta hacer en tu tiempo libre? ¿Aficiones? Pues ya no me acuerdo.

Bueno, es un poco broma pero vamos, desde que soy madre pues es difícil encontrar tiempo libre.

Pero bueno, antes como familia pues salíamos a ver una película así como tradición cada viernes y era algo que me gustaba mucho.

Pero bueno, desde que estoy casada pues casi que no veo nada en la tele prácticamente.

Pero bueno, me gusta pues la comida y la música.

La comida pues imitar gente a casa o ir a cenar fuera.

Bueno, eso me gusta mucho.

Y de la música pues todo.

Me gusta cantar, bailar en la cocina con mis hijos.

Música latinilla mientras nadie mire.

Y bueno, tocar la guitarra.

Muy bien, Raquel.

Pues ahora sí que vamos a empezar a conocerte un poquito más tu testimonio.

Así que la primera pregunta que tenemos es ¿cuál es tu conexión con la iglesia en general? Aunque ya nos ha dado un pequeño spoiler.

Pero ¿cuál dirías que es? Bueno, pues la iglesia ha sido mi refugio y mi hogar.

Y bueno, te cuento un poco por qué digo esto.

Cuando estaba en la primaria pues era muy tímida, muy muy tímida.

Y al ser creyente pues tenía una moral pues un poco diferente en algunos casos.

Y además tenía un pelo indomable y unas gafas de culo de botella que no ayudaban nada.

Entonces pues bueno, no tenía prácticamente nada.