Diario de Delbert Grady, 1970 43353q

Es programa de becas sucesos pecado sí pero mi oficio reproducción es una oro feo mío lo cosieron de co es diario de delbert creedy mil novecientos setenta día uno quince de octubre de mil novecientos setenta hoy hemos llegado al overlook la carretera serpenteante hasta aquí estaba desierta y el hotel al final de esa línea fría y vacía parecía un titán solitario aguardando nuestra llegada nos han contratado para cuidar del lugar durante el invierno cuando la nieve aísla la región del mundo exterior y envuelve cada rincón en silencio margaret mi esposa está encantada con la oportunidad de empezar de nuevo lejos de todo y nuestras hijas emily y sarah están tan llenas de alegría que apenas logran contener sus risas mientras exploran el amplio vestíbulo pero hay algo en el aire aquí es difícil describirlo el frío aquí no es sólo el de la montaña es afilado como un cuchillo que rasga cada inhalación y aunque es refrescante como beber agua helada en un día de calor algo en esa frescura parece susurrar advertencias que aún no logro entender todo es tan inmenso y tan callado que resulta imposible no sentirse observado desde el momento en que entramos sentí como si el hotel estuviera respirando en un ritmo que imitaba el nuestro como si ganara con cada paso que damos ajustándose a nuestros movimientos apenas llevo unas horas aquí y ya tengo la sensación de que el overlook guarda historias que se ocultan en las sombras latentes en las paredes y pasillos como secretos hundidos en el fondo de un lado oscuro por momentos me invade una extraña sensación de privilegio al ser elegido para cuidar este lugar un sentimiento que me desconcierta como si el hotel me hubiera estado esperando desde mucho antes de esta oferta de trabajo margaret me dice que solo necesito un poco de tiempo para acostumbrarme que el silencio absoluto es lo que nos permitirá finalmente oírnos a nosotros mismos tal vez tenga razón ella siempre es mi ancla siempre está lista para calmar cualquier tormenta en mi interior