Deseando amar (33) 734y5v

La tremenda libertad de dios dios habla cuando quiere no podemos poner ray les al espíritu santo no está en nuestra mano dirige su acción en nuestras almas en una ocasión san josemaría señalaba que jesucristo presenten el sagrario es un señor que habla ando quiere cuando menos se espera y dice cosas concretas después calla porque desea la respuesta de nuestra fe y de nuestra lealtad en efecto centra en oración no por la puerta del sentimiento ver oír sentir sino por la puerta estrecha de la fe como dice el chat manifestado en el cuidado y la perseverancia que ponemos en nuestro ratos de oración aunque a veces no lo veamos inmediatamente esos ratos siempre tienen fruto así le ocurrió también muchas veces a san josé maría por ejemplo el dieciséis de octubre de mil novecientos treinta y uno según nos relata el mismo quise hacer oración después de la misa en la quietud de mi iglesia no lo conseguí en se compra en atocha compra un periódico el abc y tome el tranvía estas horas al escribir esto no he podido leer más que un párrafo del diario sentía fluir la oración de afectos copiosa y ardiente así estuve en el tranvía y hasta mi casa san josé maría intenta aparentemente sin éxito hacer la oración en un lugar recogido sin embargo pocos minutos después en el bullicio un tranvía lleno de gente al empezar a leer las noticias del día es arrebatado por la gracia de dios y tiene la oración más su vida que nunca tuvo según sus propias palabras muchos otros santos han sido testigos de esa libertad de dios para hablar al alma cuando quiere santa teresa de jesús por ejemplo lo explicaba con la imagen de la leña y el fuego muchas veces le había ocurrido que a pesar de poner todo su esfuerzo la leña finalmente la oración el fuego no brotaba escribe me reía de mi hijo estaba de ver la bajeza de un alma cuando no anda dios siempre brando en ella aunque pone leña y hace eso poco que puede de su parte no hay arder el fuego de su amor entonces un alma aunque se quiere la cabeza se quiebre la cabeza en soplar y concertar los leños parece que todo lo haga mas creo es lo mejor rendirse del todo a que no puede nada por sí sola porque dios habla cuando quiere pero a la vez dios nos ha hablado muchas veces mejor no deja en ningún momento de hablarnos en cierto modo aprender ahora es aprender a reconocer la voz de dios en sus obras como el mismo jesús hizo ver a san juan bautista el espíritu santo no cesa de actuar en nuestro interior por eso san pablo podía recordar a los corintios que nadie puede decir señor jesús sino por el espíritu santo eso nos llena de paz quien pierde esto de vista puede caer fácilmente en la desesperanza hay quienes buscan a dios por medio de la oración pero se desea salían tan pronto dice el catecismo porque ignoran que la oración viene también del espíritu santo y no solamente de ellos para no animarnos nunca en la oración es necesario tener una gran confianza en el espíritu santo y en su multi forme y misterioso actuar en nuestras almas el reino de dios viene a ser como un hombre que hechas semillas sobre la tierra y duerma o vele noche y día la semilla nace y crece sin que lo sepas como que confianza paz y esperanza nos dan estas palabras tuyas señor tú nos hablas constantemente hablas con palabras y también con obras tu lenguaje es mucho más rico que en nuestro eres capaz de pulsar secretos resort es en nuestro interior sirviendo por ejemplo de las personas o de los sucesos que nos rodea nos habla en la escritura y en la liturgia a través del mar misterios de la iglesia del papa y como nos miras siempre con amor buscas el diálogo con nosotros en cada acontecimiento llamándonos siempre hacer santos por eso para poder escuchar ese misterio ese misterioso lenguaje divino tuyo procuramos comenzar siempre nuestra oración con un acto de fe desde dentro dios habla actuando en nuestras potencias que pueden mover desde dentro a nuestra inteligencia a través de las inspiración es hablan nuestros sentimientos a través de los afectos habla nuestra voluntad a través de los propósitos por eso muchas personas siguiendo a san josemaría al finalizar nuestra oración decimos te doy gracias dios mío por los buenos