Dando Caña | 14/05/25 336l4e

Pedro Sánchez no se conformó con observar a distancia la operación de rescate de Europa, no. Intervino, se implicó, participó. Cinco días después de que el empresario Víctor de Aldama confesara a Coldo García que Javier Hidalgo había ado con Begoña Gómez, con la esposa del presidente del gobierno, para interceder a favor de ese rescate, Pedro Sánchez habría tomado cartas en el asunto. Literalmente, el diario El Mundo ha publicado en exclusiva los mensajes de whatsapp entre el presidente del gobierno y su entonces ministro de transportes, José Luis Ábalos. Una conversación que no deja lugar a muchas dudas. Sánchez quería dar una vuelta al plan inicial y se oponía a que la británica Madrid e Iberia tomase el control de Europa.

La alternativa, una fórmula mucho más nacional, más española, como sugería un amigo del presidente. Anónimo por ciento, pero experto en el sector, según Sánchez. En ese mensaje, reenviado a Ábalos, se abogaba por proteger la infraestructura aérea española y, si se terciaba, incluso impulsar desde Ere Europa una gran plataforma del sur de Europa. Un plan ambicioso, casi geostratégico, que por lo visto pasó por el móvil del presidente. Ábalos, como buen escudero, respondió con toda la naturalidad del mundo y Sánchez le replicó que fenomenal estar informado, pero que la operación de IAG no le convencía en absoluto. Quedaba clara su línea y, mientras tanto, en paralelo, el director de la Oficina Económica de Moncloa, Manuel de la Rocha, se sentaba en reunión esclave de ese rescate.

Algo insólito, porque la Oficina Económica no solía participar en esas deliberaciones, pero aquí estaba, aquí sí. El interés del presidente podríamos definirlo como transversal. En fin, hablamos del rescate más rápido de todos los que se produjeron tras la pandemia. Cinco veces más veloz que la media, troceado en dos partes para esquivar el control europeo. ¿Que era necesario rescatar a Aereuropa? Sí. ¿Se está devolviendo el préstamo? También. ¿Se dieron condiciones duras? Es cierto, pero la cuestión aquí no es si hubo que rescatar, sino cómo se rescató y, sobre todo, quiénes sabían qué y cuándo. El procedimiento. Ábalos, por su parte, dice estar muy tranquilo, muy tranquilo, tanto que incluso dice que lleva 17 meses aguantando todas estas filtraciones.

Lo que le sorprende es que ahora los nerviosos sean otros y, mientras tanto, según Voz Populi, la OCU ultima un informe que podría poner contra las cuerdas al secretario de organización del PSOE, a Santos Zerdán. El mismo Zerdán que acompañó a Sánchez en su regreso a la Secretaría General del Partido. El mismo que negociaba con Carles Fusilamont y el mismo que, según Víctor de Aldama, recibió un sobre con 15.000 euros en una cafetería. Todo esto, insisto, no va del rescate, va de los atajos, de las puertas que se abren si uno llama al teléfono correcto, va de cómo se hacen las cosas cuando se puede hacerlas a medida. Y ahora habrá quien se escandalice. El presidente, por estos mensajes, se implicó en ese rescate y todo esto, por supuesto, lo pensó cinco días después de que su mujer fuera ada por esta empresa interesada.

Qué casualidad. Por supuesto, ninguno de estos mensajes publicados por el mundo acredita delito alguno ni constituyen por sí solos una irregularidad penal, pero sí retrata un estilo, el de un presidente que no sólo se implica, sino que impone que no sólo orienta, sino que decide con los suyos y también con los otros, porque este es el mismo Pedro Sánchez que, según esos mensajes, también llegó a explorar la posibilidad de desbancar a Alfonso Fernández Mañeco, del Partido Popular en Castilla y León, trabajando con una transfuga de ciudadanos. Las formas no son delito, pero a veces lo parecen. Buenos días, comenzamos este miércoles 14 de mayo aquí en Dando Cañas, recordando que en el Santoral de hoy celebramos a Matías Apóstol.

Muchísimos asuntos en el día de hoy, aunque hoy todas las miradas se dirigían, por supuesto, hacia esa portada del mundo, con la información que en estos momentos se está publicando Esteban Urreiceta con demás compañeros. Sobre esos mensajes de José Luis Ábalos y Pedro Sánchez han marcado, por supuesto, la sesión de control al gobierno de esta misma mañana, una jornada que debía comenzar, en la que también ha estado marcada en la Cámara Baja, por la comparecencia de Sara Agesen, por las explicaciones que la misma ha dado sobre el apagón del lunes 28 de abril. Muchísimos asuntos encima de la mesa a lo largo de esta mañana, así que quédense con nosotros en estas próximas dos horas, en las que nos acompaña don Julio Riza. Muy buenos días.

A disfrutar de mi libertad de expresión y vosotros de la vuestra, y además con un montón de espectadores que valen la pena, porque son gente de muchísimo nivel y que se hacen preguntas también, como la gente interna.