Cuerpo Mente Mundo 31-03-25 v6j22

Muy buenas tardes de nuevo con vosotros Cuerpo, Mente, Mundo en Radio Buñol. Soy José Antonio, un nuevo programa y espero que hoy disfrutéis porque os voy a hablar de algo que yo creo que está muy de moda y que ahora de cara al veranito todo el mundo tiene por lo menos el propósito de iniciar una dieta, de ponerse algo light para luego cuando se ponga su bikini o su bañador por lo menos luzca un cuerpo y no se sienta tan mal. Bueno, pues nada, os voy a hablar de las dietas. Os voy a hablar de algunas dietas, sobre todo las más las más usuales, ¿de acuerdo? Y bueno, pues con la ayuda de un nutricionista pues tendremos esa dieta que para nosotros personal pues nos irá bien si intentamos y conseguimos cumplirla a rajatabla.

Pero vamos a analizar un poco los verdaderos efectos de las dietas más populares en los últimos años, ¿de acuerdo? Y eso sí que es importante, saber un poco más menos las dietas que se están poniendo de moda y los pros y los contras de cada una. Vamos a ello. Las dietas milagro, vamos a empezar por las dietas milagro, se basan todas en excluir, es decir, quitar alimento.

Eso desde el punto de vista nutricional nunca es bueno. A ver, la dieta mediterránea, en la que es rica en aceite de oliva, verduras, frutas, pero sin descartar los lácteos ni las proteínas de origen animal, pues bueno, dicen que alarga la vida. Bien, son cosas y son cuestiones que nosotros hemos tenido prácticamente algunas veces, por no decir muchas. Y bueno, pues vamos a ir poco a poco de Renando.

Vamos a empezar por la paleodieta, ¿de acuerdo? A mediados de los años 70 se puso un poco de moda.

Antes de inventar la agricultura y la ganadería, los hombres prehistóricos comían carne obtenida mediante la caza y la pesca. Comían raíces, huevos, comían hortalizas, frutas de los árboles, frutas frescas. Suponemos también que los granos, legumbres, incluso los productos lácteos y, por supuesto, azúcares. Pero azúcares naturales de las frutas, no azúcares como los ahora que tenemos, que no formaban parte de su menú, azúcares refinados.

Parece lógico dar por sentado que con estos hábitos alimentarios y el ejercicio físico que hacían, estos hombres prehistóricos gozaban de bastante buena salud. Bueno, pues esto sirvió de ancla para elaborar la llamada paleodieta, que no tiene sentido ninguno, porque incluso los científicos no sabían bien lo que estos hombres prehistóricos comían, con lo cual ahora sacar una paleodieta basada en eso, pues no sé. Se trata de una dieta hipocalórica. Quienes la siguen, a pijuntillas, pues sí, suelen perder kilos rápido.

Sin embargo, renunciar a las legumbres, a los cereales, no parece inteligente a largo plazo.

Garbanzos, lentejas judías, reúnen muchas condiciones para poder alimentarse de ellos y tenerlos en la dieta. Quitar todo esto en la paleodieta no es muy sensato. Prescindir de ellos puede pasarnos factura. De acuerdo, y bueno, en estas dietas uno de sus principales, digamos, alimentos estrella es la carne magra. Y bueno, pues no creo que sea muy lógico pensar que una dieta rica en carne magra sea una buena dieta, ¿de acuerdo?