
¡Ay, la Caneli! - Ep.108 - Porno, placer y pantallas 582w3g
Descripción de ¡Ay, la Caneli! - Ep.108 - Porno, placer y pantallas 1k3o6b
Recibo a Douglas Smith, creador de contenido adulto que viene a contarnos su experiencia en la industria del porno. ¿Quieres dar una propinilla? Ahora puedes: https://ko-fi.com/aylacaneli Redes del podcast: https://www.instagram.com/ay_lacaneli Redes La Caneli: https://bsky.app/profile/lacaneli.bsky.social https://www.instagram.com/lacaneli 4b44u
Este contenido se genera a partir de la locución del audio por lo que puede contener errores.
¿Por qué te llamas Caneli? Por la Caneli, la Caneli, la la Caneli, ¡Ayla Caneli! Muy buenas, bienvenidas una semana más a este Ayla Caneli, cariños, yo soy la Caneli, vuestra hoste es travesti y esto es pues, ya lo he dicho, Ayla Caneli, el podcast en el que hablamos de cine, de cultura LGTBIQ+, y de todas pues historias que lleguen aquí, ¿no? Y hoy un invitado, pues, que me hace bastante ilusión tener, porque me apetece mucho escuchar lo que tiene que contarnos, es Douglas Smith, ¿cómo estás? Hola, muy bien, ¿cómo estás tú? Pues muy bien también, ¿qué te trae por aquí? Bueno, a hablar un poquito de cosas que quizá la gente no sabe, ¿qué son? Secretos.
Secretos de la industria.
Bueno, estamos obviamente metidas en redes totalmente, en internet, y habréis notado recientemente que cada vez hay más perfiles, como si dijéramos, de gente que se anima, de que toma las riendas un poco de su sexualidad y se anima a, de alguna forma, vender contenidos, explotar esa gallina de los huevos de oro que parece, ¿no? Tú fuiste un poco esta persona.
Sí, sí, tuve mi transición de rey.
Lo fui, estuve muy, muy metido en la industria, luego me dio un mental breakdown, me salí y ahora estoy como ahí rozándolo otra vez, me está respirando en la nuca porque lo necesito para pagar unas cosas.
Claro, estamos hablando de la industria, la industria, que parece que está aquí sobrevolando, pero es la industria del porno, vamos a hablar un poquito de la industria del porno, en este caso gay, obviamente, porque claro, cuando el problema que hemos tenido a la hora de buscar la excusa de las películas, de hablar también de cine, es que casi todas las películas que existen sobre el tema son sobre cine porno, cine erótico heterosexual.
No nos interesan los heterosexuales en este podcast, lo sentimos mucho, Boogie Nights está muy bien, pero pues que se la vean los heteros, nosotros nos interesa un poquito más la parte queer, la parte LGTB.
¿Tú cómo llegas al mundo del porno? Ya directamente.
Bueno, yo antes de vivir aquí me recorrí toda Latinoamérica, o sea, yo salí de Venezuela, me fui a Colombia, de Colombia me fui a Perú, de Perú me fui a Chile.
¡Wow! Y...
Un nómada, ¿no? Sí, y el tema de la residencia en Chile son dos visados complicados y como que tienes que costizar ocho meses seguidos para que te den la definitiva, y a mí me despidieron del hotel donde estaba siendo el gerente a mitad de año y pasé cuatro meses sin conseguir curro.
Entonces, habían como en esa época cuatro o cinco generadores de contenido en Chile, yo conocí a uno y me dijo, pero ¿por qué no grabamos, quizás te vaya bien? Y así fue, porque no tenía dinero, literalmente me llevo la necesidad y es como, bueno, venga, vale.
Y gracias a eso, de hecho, el siguiente trabajo que conseguí, lo conseguí porque los dueños del hostal, del hotel y boutique donde trabajé eran gays y me habían visto en internet.
¡Jaja! Hostia.
Y entonces...
Trabajo llama trabajo, ¿no? Ya.
Al principio, de hecho, me lo dijeron en la entrevista, como que les hace un poco de ruido que me habían visto en internet, llamaron a otra persona realmente, dieron que no funcionaba y después me llamaron a mí y me dijeron, tú eres la persona que estaba más calificada, pero nos da un poco de miedo.
Qué fuerte, o sea, que te discriminaron un poquito por el tema de...
Sí, y no fue la primera vez, aquí también me ha pasado varias veces.
La gente como que cree que eres solo eso y que no puedes hacer más nada.
Porque claro, tú empiezas haciendo vídeos un poco con crear la base de contenido.
Claro, para los fans, lo que pasa es que yo estaba en Chile porque me quería ir a Nueva Zelanda.
Chile era lo más fácil, era lo más barato y estuve dos años ahí trabajando, ahorrando y cuando apliqué la visa a Nueva Zelanda me lo negaron por ser venezolano porque soy venezuela.
Ok.
Esa fue la única razón y yo odiaba Chile.
Y dije, pues nada, me voy a España y compré un todo y a las dos semanas me vine.
Y al llegar aquí, a las dos semanas hice una colaboración con Alan Kim por casualidad.
Tú le conocías ya, supongo.
No, lo conocí ese día.
Realmente iba a ser yo y cámara, ellos iban a grabar un trío, pero uno de los chicos no se empalmaba porque como que le daba mucha...
Alan lo ponía nervioso y él ya iba mentalizado.
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