[24] 'MARCHA IMPLACABLE DE KRELL Y HELSNICHT' Warhammer el Fin de Los Tiempos 3l2g3f

El ejército de creel avanzó a través de las tierras yermas a un ritmo implacable nunca se detuvieron pues no necesitaban sustento ni sueño sino que avanzaron sin descanso hacia el sur como esperaba el señor tumultuario las tierras estaban plagadas de pieles verdes muchos se habían marchado tratando de luchar contra el remoto norte pero a pesar de este éxodo decenas de tribus de orcos y goblins se quedaron la mayoría de los pieles verdes huyeron ante la horda de no-muertos y la inquietante oscuridad sobre sus cabezas aquellas tribus que resistieron fueron rápidamente exterminadas cree prestó poca atención a estas batallas nada dispuesto a malgastar tiempo o tácticas en ellos cada vez que un caudillo orco ponía su temple a prueba los muertos vivientes simplemente abrumaban a los pieles verdes aceptando de buena gana miles de bajas para lograr alcanzar una rápida victoria no había necesidad de cautela pues ahora cree él comandaba la mayor fuerza de no muertos reunida desde que nagas y sus ejércitos dirigidos por vampiros invadieran por primera vez la gran tierra de cara esta era una fuerza muy diferente a la que en tiempos pasados marcharon con orgullo desde sylvania estandartes con emblemas de una casa antes noble controlados por comandantes vampiros señoriales y llenos de larga tradición este era un ejército mestizo una horda desastrada que mezclaba gente de pueblo recién convertida con guerreros convocados de tiempos antiguos algunos regimientos llevaban las insignias de provincias del imperio otros de naciones olvidadas en esta unión impía los cadáveres de los norteños caminaban junto a sus víctimas la magia ni romántica animaba cadáveres de no más de una semana o restos reconstruidos de bárbaros que luchaban junto a sigmar en la primera batalla del paso del fuego negro ahora todos eran lo mismo una masa caótica y palpitante que marchaba por orden de creel el propio creel comandaba desde el centro del ejército bajo el estandarte de la legión maldita pues sus guerreros de antaño fueron reanimados una vez más su segundo al mando seguía siendo un fic mano negra y era este rey tumular yo quien encabezaba la larga columna de caballería que cabalgaba junto a las hordas a pie cuando las tierras rocosas dieron paso a terrenos más embarrados el ejército de creel se enfrentó a la última barrera antes de salir de las tierras yermas las marismas de la locura en su prisa creel no intentó sondear los caminos cambiantes de dicha ciénaga limitándose a avanzar miles de muertos vivientes se perdieron cuando el barro y las arenas movedizas se cobraron su peaje pero estos agujeros se llenaron de tantos cuerpos que los regimientos que les seguían podían caminar fácilmente por encima los guerreros pisoteado serán como insectos atrapados en sabía a medida que el ejército babeaba con el barro hasta la cintura más muertos vivientes se perdieron en el pantano por bestias o emboscadas de goblins del pantano tales asuntos resultaron triviales para creer que empujó aún más a sus fuerzas hacia lo profundo de los pantanos