(2023-06-20)-55ªSESIÓN. LOS MISTERIOS DE SHAMBALLA por jesús jurado 6e2p4o

Hola, buenas tardes, unidos de nuevo. Una sesión más, la número 55 de los misterios de Shambhala, obra de Vicente Beltrán Anglada, que semanalmente este estudiante ha convertido en diapositivas y las comparte con el grupo que le acompaña. No hemos añadido absolutamente nada ni hemos quitado nada al libro original que se encuentra en el servidor de la Asociación Vicente Beltrán Anglada que cualquiera puede descargar. Estamos en la sesión número 55 y hoy es martes 20 de junio del 2023.

Aquí finalizó la sesión número 54 la semana pasada. La acumulación en el aura etérica del planeta por absorción magnética de una serie de residuos kármicos procedentes de más allá del sistema solar esotéricamente descriptos como mal cósmico que empañan la nitidez del espacio planetario e impiden la penetración en él de las energías espirituales del sol que determinan la evolución de los reinos, las razas y las especies.

Seguimos en el capítulo 13. Acumulcamos en el tema del mal cósmico, todo aquello que procede de antiguos sistemas solares, de antiguas estrellas y de antiguos planetas que al descomponerse dejaron el espacio trozos de sí mismo, parte etérica sin resolver y que los diferentes logos tienen que hacerse cargo a la hora de encarnar.

En principio nos parece un método muy solidario porque al llegar al final de la vida de una estrella evidentemente se produce una descomposición y eso queda ahí y las entidades que vengan después a evolucionar en ese territorio, en ese espacio, evidentemente deberán limpiarlo. Más o menos como cuando nosotros encarnamos en un país, una familia y tenemos que trabajar el problema que esta familia tiene o la característica que tiene o este país.

Mal cósmico empañan la nitidez del espacio planetario e impiden la penetración en él de las energías espirituales del sol que determinan la evolución de los reinos, las razas y las especies. Si nosotros pudiéramos responder un poquito más a la energía solar, al sol, evidentemente estaríamos mucho mejor de salud y sobre todo la vida en la tierra sería mucho más fácil de lo que es. Pero como tenemos una componente lunar muy poderosa pues respondemos más a la materia densa que no al aspecto más sutil de esta materia, a la energía solar. Continuamos. La existencia en los niveles psíquicos del planeta de una prodigiosa serie de gregores o formas psíquicas condensadas allí desde tiempos inmemoriales por las actitudes incorrectas de los hijos de los hombres.

Actitudes incorrectas de los hijos de los hombres. Estas formas mentales están ahí. De hecho la pandemia que tuvimos hace unos años es ni más ni menos que una forma mental atesorada a lo largo de las décadas por la humanidad y concretamente no desde el fin del principio de los tiempos sino muy especialmente desde los años 40 del siglo pasado cuando finalizan las guerras mundiales y en lugar de reconstruir una vida, un mundo, una sociedad basada en las correctas relaciones humanas se apostó por la competencia desleal y por el armamentismo y eso es algo que se tendrá que pagar tarde o temprano.

Podemos observar aquí tres principales focos de energía negativa cuya polaridad es netamente material y egoísta y constituyen en su íntegra interacción un sólido bloque de fuerza cristalizada que exige redención y liberación, redención y liberación. Una parte muy importante del trabajo mediador de los avatares e instructores espirituales del mundo consiste en la destrucción previa de muchos de estos factores condicionantes existentes en el aura planetaria y en los niveles psíquicos.

De hecho, nosotros llevamos décadas trabajando la gran invocación y pidiendo precisamente la llegada de un avatar, pero sabemos también que el avatar utilizará nuestros vehículos superiores, nuestra aura, para poderse manifestar. Por lo tanto, si no hemos hecho el trabajo de limpieza en la etapa que nos corresponde a nosotros de aquellos egregores no muy poderosos, medianamente poderosos que hay en la humanidad, realmente no esperemos la llegada de ningún avatar. Si lo hubiésemos conseguido, podría aparecer una revelación y esa revelación sí que anihilaría durante un tiempo a grandes egregores y nos prepararía