1222. Otra práctica de meditación de 25 minutos 2k6rx

Antes de empezar a practicar en este canal con estos audios, en la descripción de este audio tanto en iVoox como en Youtube tienes enlaces a varios cursos introductorios a la meditación que yo tengo en este canal. Te recomiendo hacer esos cursos introductorios y después si quieres seguir estos audios acompañándonos todas las mañanas para practicar 10 minutos de meditación. Vamos con nuestra práctica.

Muy buenos días. Hagamos meditación. Sin más preámbulos.

Unos veinticinco minutos. Yo estoy sentado en una cama con las piernas cruzadas. Me voy a quitar la chaqueta porque tengo calor.

Voy a estirar mi espalda, hago una ligera tensión sin que me llegue a molestar y suelto.

Ya cuando dices vamos a hacer veinticinco minutos ya dices uff, puede hacérseme un poquito largo esto, es que es mucho tiempo. Sin embargo, si dices vamos a hacer diez minutos pero terminas haciendo veinticinco no se te ha hecho largo. Así que un truco siempre es engañar a los límites de nuestra mente. Que muy sabiamente nos dice uff esto va a ser demasiado. Entonces le podemos proponer diez. Pero vamos a hacer más. Vamos a hacer nuestros diez minutos. Los vamos a hacer rapidito. Vamos a hacer más.

Y vamos a empezar con nuestras respiraciones completas. Podemos hacer cinco minutos. Yo siempre te he dicho que con estas respiraciones que hay que encontrar, hay que encontrar un ritmo. Que eso es lo bueno. No tanto si la haces muy profunda o tal. Y estas respiraciones son muy buenas para conectar con la respiración antes de la práctica de meditación. Llegando hasta abajo, parte media, parte alta, sin forzar demasiado, aguanto un instante y suelto. Contrayendo el estómago. Me gusta hacerla, sobre todo la suelta del aire, lenta, larga y sonora.

Pero sobre todo sonora hacia adentro. Si abres tus oídos, no sé si lo has hecho alguna vez, prueba a ver. Cuando sueltas el aire se escucha por dentro como un torrente, como si fuesen unas cataratas. Y eso ayuda a la concentración. Vamos a hacer cinco minutos y haremos, no sé, las que salgan. Podemos ir contándolas. Recuerda que cuando sueltes el aire puedes esperar un segundo a que sea el cuerpo el que inspire por su cuenta. Y luego ya seguir con la inspiración de manera voluntaria. Vamos a empezar ahora.