Ep.183 Juicio a Japón 1946-1948:⚖️Justicia y Crímenes de Guerra en el Lejano Oriente 5v6w4c

Bienvenidos a tucumán ia y gracias por escuchar este programa donde los documentales cobran vida en forma de audio en este canal te llevaremos a través de historias fascinantes descubrimientos sorprendentes y temas que expandirán tu mente no importa si eres un amante de la historia la ciencia la naturaleza y los misterios del mundo en tucumán ia siempre encontrarás algo para despertar tu curiosidad si disfrutas de nuestros documentales no olvides suscribirte y dejar tu valoración esto nos ayuda a seguir creando contenido de calidad para ti y recuerda en tucumán ia el único límite es tu curiosidad dicho esto vamos con el episodio de hoy ponte los auriculares usa tu imaginación y acompáñanos en este viaje a las doce del mediodía del quince de agosto de mil novecientos cuarenta y cinco japón por primera vez oyó la voz de dios lo que sintieron setenta y tres millones de japoneses aquel día es casi indescriptible durante toda su vida les habían dicho que eran una raza superior escogida por el cielo para ser los amos de asia se sacrificaron día tras día durante años y trabajaron unidos sin descanso para convertir á la madre patria en un gran poder militar durante años lucharon por esa causa noble por un futuro brillante feliz pacífico y próspero en toda asia aún más para ellos era una guerra santa una guerra en nombre de un dios viviente el descendiente directo de amaterasu la divinidad del sol el emperador hirohito y en su nombre conquistaron países y cometieron terribles atrocidades su nombre lucharon valientemente y murieron heroicamente en su nombre se suicidaron y mataron a sus propios hijos antes de permitir que cayeran en manos de los demonios blancos el país aquel día por primera vez el soberano celestial se dirigía a sus humildes súbditos la voz apagada que se oía en los aparatos de radio de todo el imperio era solemne y afligida y la gente lloró primero por oír hablar a su dios y después por lo que estaba diciendo todo había sido en vano la guerra había terminado debían rendirse y siete millones de soldados obedecieron y dejaron las armas en las siguientes dos semanas más de mil súbditos leales del emperador se suicidaron pero cientos de miles de militares y funcionarios en vez de suicidarse se dedicaron a destruir sin miramientos cualquier prueba incriminatoria durante dos semanas las hogueras ardieron por todo japón día y noche y no sólo era por salvar el pellejo los cables de alto secreto que recibían de tokio no dejaban lugar a dudas todos los documentos deben ser destruidos lo antes posible no puede quedar ni una hoja de papel comprueben el fondo de los cajones los papeles de debajo de las patas de las mesas y los que se han dejado fuera de las estanterías todo fué cuidadosamente destruido no se podía salvar nada ni siquiera el objeto más venerado de todos aquel que debía rescatarse de un edificio en llamas o de un barco que se hundía antes que cualquier otro objeto el retrato del emperador japón no estaba quemando simplemente las pruebas que estaba quemando su pasado dos semanas después del discurso los soldados estadounidenses llegaron a japón el capitán de corbeta ted de barry dijo lo siguiente no queda casi nada las bombas incendiarias lo han destruido todo pero los estadounidenses no estaban preparados para enfrentarse con el enemigo esperaban encontrarse un país lleno de seres primitivos sedientos de sangre como habían oído y en vez de eso se encontraron con personas esto dijo el embajador