📝 EL SILENCIO DE MI INTERIOR de ENCARNACIÓN NAVARRO 1q2423

Este relato que vas a escuchar pertenece al concurso organizado por abasí asociación valenciana de afectados de fibromialgia la colaboración de yet radio si quieres más información sobre buffy entra en tres uve dobles punto a buffy punto o hereje el silencio de mi interior por encarnación navarro jiménez nunca podré olvidar aquel día cuando me diagnosticaron fibromialgia hace doce años después de visitar innumerables veces los hospitales y sin tener respuesta a mi estado de salud aquella tarde cuando el especialista de la unidad de dolor me dijo cuál era el nombre de mi padecimiento fibromialgia solo vino a mi mente una pregunta cómo se cura mi cuerpo se estremeció cuando escuché no tiene cura salí de allí me senté en un banco de aquel parque para asimilar todo aquello poder encajar cada palabra en mi mente sólo sonaba fibromialgia no sabía cómo pronunciarla no sabía como mencionan aquella enfermedad que no tenía cura y que me iba a acompañar para el resto de mi vida tantas preguntas sin respuesta cómo iba a vivir así con dolor continuo sin respiro como llegar a casa con este diagnóstico y cómo explicárselo a mi familia a mi esposo una enfermedad que no se ve que sólo el siento yo en mi carne en mis articulaciones en mis noches de insomnio y que me estaba destrozando no quería hacer sus los demás ya era bastante con lidiar con mi propio sufrimiento así que respiré profundo sequé mis lágrimas y me coloqué un escudo lleno de valor lleno de coraje y me dije a mí misma vale no tiene cura pero yo voy a mejorar no sé cómo pero lo haré sin saberlo que me esperaba empecé mi peregrinaje visitando cuántos fisioterapeutas me decían que era bueno visitando clínicas que te decían que te iban a aliviar el dolor o por lo menos los síntomas citas trans citas que al final sin resultados alguno y lo poco que conseguía solo era algo pasajero momentos fugaces ilusiones vanas que me volvían a mí realidad cuando volvía el dolor veía las caras de mis padres y mi esposo ese gesto esa mirada que me infundió aliento encontraba en ellos consuelo mi vida cambió dio un giro ya no podía trabajar ya los paseos los viajes los encuentros entre amigos todos fue disminuyendo empezaron las bajas mes chicas que me acompañan hasta el día de hoy y sin imaginar que este también sería un gran muro que me tocaría escalar burocráticamente hablando pero ese es otro tema los brotes de la enfermedad se hacían cada día presentes con una fuerza con un ímpetu hasta el día de hoy me acompañan me anclan en el pasado en los recuerdos y en el sufrimiento en mi dolor y eso aumentaba mi calvario mi depresión mi tristeza los días tan largos y noches eternas me fui encerrando en mi misma ya no tenía un escudo ahora en un cuarto oscuro mi casa era mi único refugio mirando siempre por la ventana la vida de los demás y como el título de mi relato el silencio de mi interior me fui ocultando por la incomprensión y falta de empatía de los que me rodeaban que muchas veces te hace mucho más daño que el propio dolor incomprensión si por parte de esas revisiones en tribunales médicos donde te hacen sentir tan pequeñita tan poca cosa y con ella la impotencia tremenda de sentirte tan vulnerable ante la mirada escrupulosa de los que desconfían de tu diagnóstico y es ahí donde mires a tu alrededor y te vuelves a preguntar dónde están esos amigos que una vez te dieron la palmadita en la espalda y ahora te ves sola sola ante un juicio que no solo es médico sino también de los mal llamados amigos donde están y con esa ausencia llegan los comentarios que cargan tus espaldas con una mochila que no te corresponde carga pues yo te veo bien no es para tanto claro que no es para tanto cuando hablan desde el desconocimiento hoy en día no es que me encuentre mejor mi situación ha empeorado y aunque camine un poco más lento y tenga que responderme después de cada brote mi mente se ha fortalecido gracias a las personas que en el camino llamado vida me han presentado entre ellos a bachi asociación de fibromialgia y síndrome de